Datos que preocupan, y que marcan a las claras un deterioro que se está convirtiendo en progresivo en los últimos tiempos.
Luego de la bonanza económica, y en medio de una crisis que golpea a casi todos los sectores, un informe de la secretaria de política institucional de UGT de Cataluña deja a la luz cifras escalofriantes.
Según el estudio «Más ricos… pero más pobres», uno de cada cinco catalanes tiene ingresos inferiores al umbral de la pobreza (1,3 millones), que según el Instituto de Estadística de Cataluña (Idescat) rondan los 8.276 euros netos anuales.
Según Eva Granados, mientras el Producto Interior Bruto (PIB) catalán creció un 28,2% entre 2000 y 2006, la pobreza lo hizo un 16,4%.
La dirigente ha expresado que estos datos revelan que Cataluña «se está enriqueciendo, pero paradójicamente cada día hay más personas pobres».
UGT asegura que Cataluña se encuentra ante un «problema estructural del sistema de bienestar y redistributivo catalán». Granados ha destacado que entre 2005 y 2006 se registraron 152.000 personas más en situación de pobreza.
El estudio deja en evidencia que quienes están en mayor situación de riesgo, son las mujeres, especialmente las mayores de 65 años o aquellas que viven solas con hijos a cargo, además de los inmigrantes.
Números que reflejan esta penosa situación evidencian a 1,3 millones de catalanes en riesgo de pobreza, de los cuales el 28,4% es gente mayor; el 20,8% son mujeres y el 31,1%, mujeres de más de 65 años.
El porcentaje de inmigrantes en esta situación es del 40,1%, las personas desocupadas suponen el 29,7%, los jubilados, el 25,61% y las familias monoparentales con un o más hijos dependientes, el 41,6%.