Los productos financieros, que nos parecían tan atractivos con aumentos en las remuneraciones, por ejemplo en los depósitos o en las cuentas, nos dan nuevos dolores de cabeza.
Los fondos de inversión, ya no son tan rentables, y las hipotecas han sufrido aumentos en los tipos de interés fijos, y en los diferenciales, en aquellas vinculadas al euribor.
Ahora, nos desayunamos de una nueva mala noticia, se han incrementado nuevamente las comisiones en algunos productos, en especial en las cuentas.
Desde junio, las entidades financieras han elevado las comisiones en el mantenimiento de las cuentas corrientes en un 4,81% y para las cuentas de ahorro en 5,03%. Es decir que el promedio que ahora pagaremos es de 19,82 euros y 18,98 euros respectivamente.
Pero este no fue el primer aumento, este año hemos sufrido tres incrementos. Para comparar, en marzo las comisiones se situaban en los 19,18 euros para una cuenta corriente y 18,34 euros para una de ahorro.
En cuanto a las tarjetas, los créditos y los préstamos, por el momento no se han notificado nuevos aumentos, aunque en mayo ya se habían incrementado.
Si nos referimos a las tarjetas de debito y crédito, las modificaciones de mayo dejaron una media anual en las comisiones del 2,26% y un 4,18% para las de débito y de crédito, respectivamente.