Si eres de los que creen en la suerte y pone todos los años su ilusión en el Gordo de Navidad de la Lotería Nacional, ya sea para dejar de trabajar o simplemente para tapar algunos agujeros, aprovecha este año, pues será el último en el que el premio estará exento de pagar impuestos.
De esta manera, Hacienda ha anunciado que a partir del próximo uno de enero de 2013, se aplicará un gravamen del 20% sobre los premios superiores a 2.500 euros que reparte Loterías y Apuestas del Estado, entidades dependientes de las comunidades autónomas, la Cruz Roja o la ONCE, y que hasta ahora estaban exentos de tributar en el IRPF.
Así que supongamos, ganas en pedreas unos 5.000 euros, 1.000 euros irán a parar a las arcas públicas a partir del año próximo, por lo que es importante que lo tengas en cuenta y no cuentes con ese dinero. Este importe le será descontado al beneficiario directamente cuándo se le entregue el premio, de manera que no verá la cantidad entera. Así que a partir de enero, vaya echando sus cálculos si resulta ganador para no llevarse desilusiones a la hora de cobrar su premio. Sí, los recortes económicos afectan a todos los sectores y la presión fiscal no iba a ser menos. Además, esta retención también se aplicará en el caso de que el beneficiario sea una empresa.
El objetivo de esta medida tributaria es aumentar los ingresos de la Administración el año que viene en 824 millones de euros, y se suma a las demás reformas acometidas con el objetivo de rebajar el déficit para el próximo año. En cualquier caso, recordamos que el próximo sorteo de Navidad, los premios todavía estarán exentos de tributar, incluso si los agraciados deciden cobrarlo después de 2012.
Antes de esta medida y pese a las dudas que generaba, los premios de la Lotería estaban exentos de tributar, y no sólo durante el primer año, pero a partir del Sorteo del Niño que se celebra el 6 de enero, los agraciados deberán contar con un 20% menos del premio. Aún así, muchos seremos los que seguiremos poniendo nuestras ilusiones en ese dinero con el que no sólo podremos darnos ese capricho que no podemos permitirnos, si no que ayudará a muchos a hacer más fácil la salida de la crisis.