El Gobierno alemán se ha convertido en una de las primeras administraciones en aclarar oficialmente su postura ante la crisis internacional al anunciar, por un lado el retiro de los bancos del plan de salvación del Hipo Real Estate (HRE), y por otra parte, ha anunciado que «El Gobierno Federal garantiza todos los fondos privados».
De esta manera, se ha pasado a una garantía ilimitada, que suplirá hasta lo anunciado horas antes cuando se garantizaba el 90% de los depósitos hasta un máximo de 20.000 euros (cantidad mínima a la que obliga la UE).
La canciller alemana, Angela Merkel, ha asegurado que los ciudadanos no tienen que temer por sus ahorro y ha insistido en que se hará todo lo posible por responsabilizar a los culpables de la mala gestión. «Se lo debemos al contribuyente».
Mientras tanto, Alemania está diseñando un proyecto estructural para armonizar la actual situación, y entre las posibilidades que se estudian, se podría ampliar el radio de entidades que participen en el paquete de rescate a las aseguradoras, y así repartirse el plato entre el Estado, los bancos y las aseguradoras.
Esta iniciativa se conoció horas después de que un grupo de bancos privados se retiraba de un proyecto que comprendía un crédito inmediato de 15.000 millones de euros que se sumaría a un plan del Gobierno germano que terminaría inyectando unos 35.000 millones de euros para el banco.
A pesar de las declaraciones de los funcionarios alemanes, el HRE se encuentra al borde de la quiebra, y en las próximas horas seremos testigos de un nuevo fracaso, o de una victoria… veremos.