A la crisis debemos encontrarle la vuelta y no sumergirnos en el lamento constante. Al real problema del acceso a la vivienda en España, es importante que le busquemos alternativas para poder conseguirla.
En el mercado existe una forma de llegar a tener el techo propio aunque está poco difundida. Sin embargo existe, y es la venta de vivienda aplazada. Esta alternativa es similar a la de la compra sobre plano, con la diferencia de que el inmueble ya está acabado.
Sin embargo, lo más importante ocurre aquí, ya que en esta modalidad, los compradores pactan con el vendedor el desembolso aplazado de los pagos durante un periodo de tiempo en el que pueden hacer uso normal de la casa.
Es decir que la venta de vivienda aplazada , es una alternativa de acceso a la vivienda, que deja a un lado a la banca que cada vez presta menos dinero y en condiciones cada vez más duras, y pone a los promotores a cargo de la financiación.
La metodología en este tipo de operaciones se realiza a través de pagos en distintos plazos pactados con el vendedor, primero se abona parte del importe de la casa, y el resto de forma aplazada a través de múltiples fórmulas.
Entre las más utilizadas podemos destacar los pagarés no avalados o las letras de cambio, o mediante recibos o transferencias.
En cuanto a las condiciones y duración de las amortizaciones se establecen en una cláusula resolutoria que se inscribe en el registro donde se establecerán las penalizaciones por incumplimientos con las entregas.
Atentos, porque en caso de que no se realicen los pagos, aquellos inquilinos que ocupen la vivienda pierden todo el dinero entregado hasta el momento y la casa vuelve al vendedor con las condiciones pactadas en la cláusula.
Es bueno también aclarar que las letras de cambio tienen un coste notarial adicional que debe afrontar el comprador y que será más importante el monto cunado el importe y el plazo sean mayores.
Una alternativa más…