Andorra es un pequeño país ubicado en los Pirineos que, hace no muchos años, estaba incluido en la lista de paraísos fiscales de España y la OCDE. Uno de sus mayores atractivos era el secreto bancario, por lo que las familias más adineradas, tanto españolas como francesas, depositaban sus ahorros en el país. También, la ausencia de IVA y de Impuesto de Sociedades facilitaba la actividad empresarial. De hecho, según datos de 2016, en los últimos cuatro años se han instalado 1.300 sociedades en Andorra.
No obstante, Andorra ha dejado de ser un paraíso fiscal en los últimos años, pero sigue siendo uno de los mercados con mejores condiciones para la exportación.
Impuestos básicos
IVA
En el año 2014, el Impuesto General Indirecto, equivalente al Impuesto sobre Valor Añadido, llegaba a Andorra. El tipo general es del 4,5%, y se aplica un IVA reducido a productos y servicios de sanidad, educación, alimentación, cultura y alquiler. Un IVA mucho más atractivo que los de sus países vecinos, que rondan el 20%.
IRPF
El IRPF, que entró en vigor en enero del año 2015, es un impuesto por el que tributan las personas físicas con residencia en Andorra y que tengan unos salarios netos superiores a 24.000 euros. El tipo general es del 10%, aunque se puede ver reducido hasta un 50% en rentas de entre 24.000 y 40.000 euros. Por otro lado, también puede tener deducciones fiscales por situación familiar, planes de pensiones y vivienda. Lo cierto es que pagar un 10% de IRPF lo hacen solo aquellas rentas superiores a 150.000 euros.
El IRPF grava las rentas de trabajo que proceden de actividades económicas, de capital mobiliario y de ahorro. Estas últimas tienen un mínimo exento de 3.000 euros. Por otro lado, las ganancias/pérdidas de transmisiones de bienes sujetos al impuesto de plusvalías en transmisiones inmobiliarias y herencias están exentos.
IS
A pesar de dejar de ser un paraíso fiscal, Andorra sigue siendo muy atractivo para el ámbito empresarial. Desde que el Principado eliminara el requisito de una participación nacional en la empresa, son muchas las empresas que han decidido probar suerte en su mercado y exportar sus productos desde allí. Actualmente , solo en necesario tener una sede física en el país y, al menos, un trabajador.
El Impuesto de Sociedades es del 10%, pudiendo bajar al 2% en negocios que se dediquen a la inversión financiera y al comercio internacional. Además los productos industriales y agrícolas transformados no tienen que pagar aranceles en la Unión Europea.
Más allá de los impuestos, se ha avanzado mucho de cara al sector empresarial. Se han realizado convenidos, tanto con España y Francia, como con Portugal y Malta, con la entrada en vigor de convenios de doble imposición. Tanto el IRPF como el IVA y el IS son los más bajos de toda Europa.