Parece que ni la petición del Gobierno, posibilitará que este año las empresas y las familias españoles accedan al crédito. La creciente tasa de morosidad, el aumento del paro y un contexto macroeconómico lleno de inestabilidad hacen inviable la financiación en este 2009.
Para ejemplificar la actualidad que sobrelleva la banca en este rubro, diecinueve cajas y seis bancos han crecido por debajo del 5%, es decir que la caída en el ritmo de concesión de préstamos es casi una denominador común entre las entidades que operan en España.
Pero lo que un año atrás se financiaba como un proyecto viable, hoy proyectos de familias y empresas ya no son considerados como tal. Según el Banco de España, los créditos destinados a estos dos sectores crece sólo un 6,67%, un porcentual muy inferior al 18,7% que ocurría un año atrás. Según la entidad, este 2009 convivirá con esta tendencia a la baja del crédito, ya que sostiene que el estos productos crecerán por debajo del PIB nominal.
El sistema financiero español concentra en 25 entidades, alrededor del 25% del total del crédito que se concede. Veamos como han reaccionado estas entidades:
Los menos golpeados
Los grandes del sistema han sido los más «generosos», por ejemplo, Santander, mantiene el ritmo que tenía hace un año. En 2008, estos productos crecían a un ritmo del 12,5%, mientras que un año antes se presentaba un 12,99%.
BBVA, tampoco ha perdido ese impulso y sólo ha bajado del 13,7% en 2007 al 10,35% en 2008. Un caso similar es el de La Caixa, aunque un poco más pronunciado del 19,45% al 12,79%.
Situación de la mayoría
La amplia mayoría de las entidades vive un panorama completamente diferente. En 2008 han reducido fuertemente ese ritmo, y las once principales entidades del país, no se han salvado.
Quien encabeza estos descensos es Caixa Cataluña, que en noviembre de 2007 incrementaba la financiación a un ritmo del 27,03%, mientras que un año más tarde, sólo lo hizo al 1,69%. Otro que ha imitado esa tendencia ha sido CAM, que ha pasado de un 20% a al 2,67%.
Esta situación ha impactado a Bancaja que también ha reducido la concesión de créditos de porcentaules que superaban un 25%, y han caído un año después por encima del 5%.