Más de 5 millones de cuentas bancarias se vieron embargadas por parte de la Agencia Tributaria, durante 2010 embargó 3,3 millones de cuentas bancarias con el objetivo de poder asegurarse cobrar deudas con la Administración que tienen los titulares de dichas cuentas.
A la anterior cifra habría que agregarse las inmovilizaciones de cuentas llevadas a cabo por la Seguridad Social, con ello se llega a las más de 5 millones de cuentas, siendo la mayor cifra registrada en este concepto.
Así como hace poco se dio la noticia del cuelgue de la Web de la Agencia Tributaria a la hora de solicitar el borrador de la renta, por otro se conoce que el nivel de la Agencia Tributaria en embargo de cuentas bancarias, es una cifra histórica, en la que durante 2010, Hacienda debió lanzar unas 4,7 millones diligencias de embargo siendo 500.000 más que en 2009, cuando fueron 4,2 millones y 1,5 millones más que en 2008 cuando lanzó 3,2 millones, así lo reflejan los datos publicados por CincoDías.
Dentro de dicha cifra abarca la inmovilización sobre cuentas bancarias, valores, coches, embarcaciones, salarios, joyas o viviendas.
Desde la misma Agencia Tributaria, aclaran que no todos los embargos se deben a la deuda fiscal, debido a que Hacienda también gestiona el cobro de multas de tráfico y demás sanciones administrativas.
Mientras que, las diligencias de embargo llegaron a 106.600 millones de euros, es decir un 31% más que el anterior ejercicio.
Hacienda señala que llegó a inmovilizar unas 3,3 millones de cuentas bancarias, y supera los 5 millones de incluirse los datos provenientes de la Seguridad Social, pero aclara que la misma cuenta se la puede haber embargado tanto Hacienda como la Seguridad Social.
La Agencia Tributaria puede llegar a embargar hasta 20.000€ automáticamente, dicha cuantía ha ido creciendo sustancialmente, ya que previamente a 2009, el techo de embargo era 6.000€.
Dado que ha iniciado el periodo de los calendarios fiscales de la declaración de la renta, pueden consular el Calendario de la Declaración de la Renta 2010.
Imagen: Despilfarro