Grecia es el epicentro del tembladeral en Europa no solo en la Eurozona y el temblor que provoca no proviene del centro de la tierra sino de un país y Gobierno que no sabe más que hacer y que aceptar por equilibrar sus cuentas.
Todos los males que puede desparramar Grecia con su crisis de deuda y el término efecto contagio vuelve a ser utilizado.
Ante todo esto la agencia de calificación Standard & Poor’s le ha rebajado el rating a Grecia es decir su calificación de la deuda a largo plazo pasándola de (BB-) a (B).
Esto se da a partir de las estimaciones que hablan de que se de una prórroga en los vencimientos de la deuda de Grecia. Además le rebajo la calificación de su deuda a corto plazo pasando de (B a C), manteniendo estas calificaciones en vigilancia y tendencia negativa.
No es solamente consideración de S&P también los principales acreedores de la eurozona creen firmemente que se deberá ampliar el vencimiento del pago de la deuda de los préstamos bilaterales por 80.000 millones de euros cuyo prestamista es la Comisión Europea.
Por lo que, los gobiernos acreedores de la eurozona deberán buscar la extensión de los vencimientos de bonos y préstamos tal como pasa con los acreedores comerciales.
De suceder finalmente esto, S&P debería empujar la calificación a la alarmante nota de (SD), que esta asociada con el término default selectivos.
Aunque S&P remarca que las calificaciones se encargan de analizar la capacidad y voluntad del emisor de deuda soberana que tiene para pagar su deuda comercial, si se diera la reestructuración de la deuda que esté asociada con las ayudas de sus socios europeos y no se modificara la deuda comercial en ese caso no se trataría de »default».
Imagen: idiotsingracia.blogspot