En pleno auge en ventas de teléfonos móviles, y mientras los consumidores demandan cada vez mas tecnología y servicios, existe una puja “salvaje” entre las compañías proveedoras de los aparatos.
Mientras las ventas globales de teléfonos móviles subieron en 2006 hasta los 289 millones, un 15% más que en el tercer trimestre de 2006, un gigante tambalea.
En una noticia publicada por su edición online del periódico El Pais, quien peor la está pasando es nada menos que Motorola, que no encuentra como hacer pie frente a sus rivales en el mercado y ve peligrar su futuro como una de las “Top
Pero, ¿el mercado necesita de tanta competencia salvaje?
Hoy, el mercado se multiplica de a millones de personas que necesitan, y dependen, de sus aparatos móviles. A mayor cantidad de empresas, existe mayor competencia, por lo tanto la oferta y la demanda ascienden en escala.
Según datos de la firma de analistas Gartner, Nokia se consolida como mayor vendedor de teléfonos móviles del mundo, y además, amplió su dominio en el mercado abarcando un 38% de las ventas totales en el tercer trimestre.
Ante esta crisis Motorola despidió a 5.000 empleados, y reflejó un beneficio neto del grupo con una merma del 94%, hasta los 60 millones de dólares. Los ingresos cayeron desde los 10.603 millones del tercer trimestre de 2006 hasta los 8.811 millones este año. Es evidente que el gigante parece no hacer pie en sus números, y es mucho mas claro entenderlo si vemos que la telefonía móvil genera prácticamente la mitad de la facturación de Motorola.
Mientras las empresas compiten a capa y espada y se desangran por dominar el mercado, los clientes demandan servicios cada vez más complejos, y se meten de lleno en una puja que los tiene siempre a la expectativa.