El plan de ajuste de Italia viene creciendo en rechazo, tanto como seguramente podrá verse en EE.UU cuando se aplique a pleno, y si las medidas generan fuertes protestas, lo que más les indigna a los ciudadanos en este caso a los italianos, más allá de las medidas en sí es en quienes recaen estas. No cuesta adivinar que los más ricos escaparán al aumento de impuestos o de otras medidas. Mientras la prima de riesgo aprieta.
Rechazo, protestas y huelgas
Después de haberse conocido el plan de ajuste de Italia, se da un más que anunciado rechazo al plan de ajuste de Italia que sale de los sindicatos, patronal y partidos de la oposición y se lo harán notar con huelgas generales.
En especial por que las medidas se dan sobre las espaldas y los bolsillos de los más afectados por la crisis y las clases medidas que además de no poder llegar a fin de mes holgadamente.Como sucede con los planes de ajuste UE.
Fue dado a conocer la semana pasada por el Gobierno italiano el nuevo plan de ajuste de 45.500 millones de euros con el objetivo de un equilibrio presupuestario en el año 2013, también aportaría calma a los mercados por la crisis de Italia.
El sindicato mayoritario CGIL, anunció una huelga general para demostar su total rechazo a las medidas injustas aprobadas por el plan de austeridad, la huelga fue fijada para el 23 agosto con los sindicatos Cisl y Uil.
Algunas quejas que se dan sobre el plan aprobado es que no contiene intervenciones en cuanto a la evasión fiscal.
Otros apoyan la medida de reducir el sueldo de los diputados y de los senadores, falta que trate lo del sueldo de los vitalicios y recortar el número de parlamentarios para dar un paso adelante en este tipo de medidas.
Además de solicitar una medida recaudatoria como la de pagar la contribución de solidaridad, grava un 5% sobre los salarios que estén por arriba de los 90.000 euros al año, y un 10% en los salarios que superen los 150.000 euros.
Un plan que no ajusta dónde debe
Viendo como se ha esquivado algunas medidas que serían mas que justas, desde algunos partidos tildan el plan como poco creíble e injusto.
La patronal también se suma al rechazo, como la principal Cofindustria, que pide no sol,o al Gobierno sino que también a la oposición a que aprovechen el trámite parlamentario del decreto ley y que reformen las pensiones de jubilación. Lo que piden no es recortar los subsidios a los jubilados, buscan que pueda seguir trabajando quien más ganas tenga de hacerlo y con lo que mejorar el mercado laboral y otras medidas para luchar contra la tasa de paro.
Al igual que para en EE.UU se ha esquivado el afectar a los más ricos, y uno de ellos que desea que se afecte a los ricos es el presidente de Ferrari, Luca Cordero de Montezemolo que esperaba que el decreto ley figurara un impuesto sobre los patrimonios de más de 5 o a los 10 millones de euros anuales para castigar a los que verdaderamente evaden impuestos.
Imagen: portafolio