Soluciones mágicas aún no hay, por lo que el gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero sigue intentado apaliar la crisis, acabar con el paro y sanear la economía, logrando que los españoles estén felices. Todo, o casi todo lo que se propone desde el Gobierno, suele ser recibido, en el mejor de los casos, con escepticismo por la población, y peor por la oposición.
El Partido Popular hizo llegar algunas propuestas, con la esperanza de ser recibidas y ejecutadas. Con el objetivo de llevar un control más exhaustivo y así tener un panorama actualizado de cómo se actúa ante la crisis, el coordinador de Economía del PP, Cristóbal Montoso, propuso que además del informe cuatrimestral que presenta el ministro de esa cartera, haya una del secretario de Estado de Economía entre cada presentación.
Asimismo, se dio a conocer la propuesta de un tercer nivel de control que, proponen, esté integrada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores y la Intervención General del Estado.
Por otra parte, el PP solicitó en su momento que sea el Banco de España quien controle al fondo de compra de activos, y que además sea el agente y depositario del fondo y le preste asesoramiento técnico.
Sobre el Fondo, también pidieron que éste no sea utilizado para financiar a las entidades más fuertes, sino que favorezca a los de tamaño mediano y pequeño, diversificando el riesgo de ese modo y ayudando a quienes más crédito brindaran a empresa y particulares.
Hace poco mas de un mes, el portavoz del Ejecutivo de Canarias, Martín Marrero, definió de “voluntaristas” las medidas que propone Rodríguez Zapatero y dijo que “ya pasó lo de intentar el pan para hoy y hambre para mañana” y afirmó que hasta ahora lleva escuchados mas eslóganes que soluciones.
Sostuvo además, que “algunas medidas de las propuestas implican financiación de las comunidades autónomas, que no han sido consultadas previamente, por lo que no parece que vaya a ser sencillo aplicarlas».
Saber donde uno está parado y saber dialogar y negociar son dos ítems importantes que se suman a lo que se puede hacer para enfrentar una crisis como la que el mundo, y en este caso en particular España, afrontan. Enhorabuena si la oposición ayuda, pero parece que la paciencia se deteriora como la economía.