Si en España de dice resetazo o impuestazo cual será la palabra que defina a una subida de impuestos masivos, por lo pronto le puede quedar el término abuso fiscal o presión fiscal. Entre las medidas está la de reducir los tramos del IRPF de 8 a 5. Así el Gobierno de Portugal salió a anunciar lo que varios sectores definen como una fuerte y masiva subida de impuestos con el objetivo de reducir su déficit, algo que ocurre en España también por lo que entre otras medidas debió subir el IVA y adelantar su aplicación.
En el caso del Gobierno portugués este aumento de impuestos será en 2013 ya que le urge poder cumplir con los objetivos de déficit implicados en su rescate. Además de que debió empeorar las previsiones macroeconómicas referidas a 2013 en la que figura un aumento del desempleo llegando a la alarmante cifra de 16,4%. Desde el Gobierno a través del ministro de Finanzas, Vítor Gaspar, dieron a conocer lo que serán los aumentos y dónde tocará pagar más.
No solo son aumentos de impuestos, también tocará sufrir por parte de los portugueses las medidas de austeridad que vienen siendo aplicadas en este año también por el déficit. Lo que empezará a afectar será:
-La presión media del impuesto sobre la renta que sube desde el 9,8% al 13,2% en 2013
-Baja de los tramos fiscales de 8 a 5
-Gravámenes al tabaco
-Gravámenes a las transacciones financieras
-La tasa media del IRPF sube del 9.8% al 11,8%. A más ingresos más alto el impuesto y un aumento del 4%.
Parte de estas medidas buscan reducir el déficit estatal que supone un lastre para las cuentas del Estado, no es una novedad para los golpeados portugueses el vivir entre el paro, la crisis en geenral y el aumento de impuestos, ya que entre 2011 y 2012 se les ha aplicado una serie de subidas de impuestos nada leves por cierto.
Con todo esto el descontento social crece en todo Portugal y más si encima les llueve una subida de impuestos. Parecía que se calmaban las quejas debido a que el Gobierno debió volver atrás con el recorte de salarios del 7%, visto esto el mismo decidió avanzar por el lado de subir impuestos como compensación en especial una suba del impuesto sobre la renta.
Además de imponer estos impuestos, el Gobierno de Portugal tiene que trabajar contrarreloj ya que viene registrando un empeoramiento respecto a sus estimaciones económicas de 2013, como es el dato de la tasa de paro que viene en franco ascenso ubicándose en el 16,4%. Otro mal dato es que sube en una décima al 1%, su previsión del PIB que es a la baja para el ejercicio 2013.
Actualmente Portugal pasa por su peor crisis económica en medio de cualquiera de los procesos democráticos por el que ha pasado el país luso, ya que ninguno hasta ahora hizo que Portugal debiera pasar por un rescate, claro que no hace tanto que está la posibilidad de salir a pedir asistencia financiera a la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI), pero algo que debió salir a pedir ayuda por Mayo de 2011 y que todavía sufre las consecuencias y las seguirá sufriendo.
Mientras que lo que hace a los ajustes, servirán como fórmula compensatoria por la devolución de una de las dos pagas extra anuales, las mismas fueron quitadas a los pensionistas y funcionarios este año a partir de la sentencia del Tribunal Constitucional, ya que cuyo fallo declara de ilegal la quita en cuanto a que es discriminar al recaer sobre el sector público por sobre los trabajadores del sector privados.
Como sucede con los Gobiernos que deben aplicar los ajustes, hablan de sacrificios pero los únicos que lo sienten son los ciudadanos de a pie con tal de alcanzar los nuevos límites de déficit público para Portugal de parte del FMI y la Unión Europea. Esto se debe a que su déficit de 2012 sería del 5% del PIB, para bajarlo en 2013 al 4,5%, así y todo parece que no lo podría alcanzar aunque les flexibilizaran los objetivos el de 4,5% y el 3%.
Claro que toca pasar a discutir con los agentes sociales, lo que no será fácil aunque hay apuro debido a que deben incluirse en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2013, lo que se descarta es su aprobación más allá de las negociaciones ya que el Gobierno cuenta con mayoría absoluta.