Vistos con la perspectiva del tiempo cuesta imaginar que en su momento se valorara su posible utilidad, pero, todos los inventos que hoy en día pueden pasar por extravagancia vintage tuvieron un marco en el que se consideraban parte de la evolución tecnológica…eso si, en este caso fallida. Estos son algunos de los inventos más estúpidos de la historia reciente.
Sin duda hay muchos más, pero está colección de aparatos que, en muchos casos rozan la estupidez, nos da una buena muestra de que el ingenio humano no siempre sirve para generar cosas brillantes. Repasemos algunos de estos cachivaches a caballo entre lo esperpéntico y lo hilarante.
Debemos aclarar, porque es de recibo, que una buena parte de estos inventos inútiles posee la virtud de tener una frontera muy leve entre lo que es la realidad de quien desea aportar una solución a un problema o el afán de protagonismo publicitario; no pensemos que esto último es exclusivo de la época actual ni mucho menos.
El paraguas para cigarrillos
Robert L. Stern merecería por sí solo tuvo un artículo dedicado a inventos poco útiles pero, visualmente muy atractivos o divertidos. Una buena parte de estos cachivaches se relacionaba con el consumo del tabaco, más adelante veremos otro invento inútil de Stern. En este caso no podemos resistirnos a abrir la lista con este paraguas para cigarrillos tan poco útil como divertido a la vista.
Calzoncillos para manos
Los hubo, tal vez con un sentido del humor un tanto retorcido su inventor pretendía destronar a los entrañables mitones. Obviamente no ha sido así, hoy en día en invierno aún vamos a poder encontrarnos con reinterpretaciones a la moda de los mitones, pero difícilmente encontraremos calzoncillos para manos.
La Microvisión
En este caso no podemos hablar de un invento inútil ya que, resultaba funcional y además fue precursor de posteriores desarrollos en el mismo sentido. Sin embargo, este micro televisor es recordado por el rechazo que provocó en el usuario, así como por ser el causante de director de la bancarrota de la empresa que lo desarrolló y comercializo. Aquí sí podemos hablar de algún modo de un invento adelantado a su tiempo y mal entendido por el usuario de la época.
Golf de Baño
No hay mucho que añadir.¿Tuvo éxito?, no lo se a ciencia cierta pero me inclino a creer que no…pero sí llegó a comercializarse.
La maquina de maullar
¿Hartos de los ratones?, tranquilos, aquí está Cat Mew Machine. Esta máquina inventada en Japón en los años 60 del pasado siglo, funcionaba al conectarse a la red eléctrica emitiendo de manera repetitiva un sonido similar al maullido de un gato mientras que la pieza que simula la cabeza del felino podía moverse al compás y lanzaba unos destellos rojos cada 10 segundos por los ojos. Puede que fuera el terror de los ratones, pero, no pudo competir con las tradicionales ratoneras.
Ruedas de entrenamiento para tacones altos
Pocas bromas en el paso del tacón medio al taconazo. Se supone que estos ruedines de apoyo sirven para mejorar el entrenamiento con los tacones altos, pero, a mi personalmente me da que no. En cualquier caso es un invento inútil pero divertido de contemplar.
Pelucas para gatos
Parece que la moda de los gatos, fotos de gatos, videos de gatos, ya está remitiendo en Internet. Sin embargo, aquella efervescencia gatuna en la red impulsó algunos proyecto e ideas como la fabricación de pelucas para gatos…no muy buena idea ya que al final, el usuario capaz de ponerle una peluca a su gato es muy capaz también de confeccionarla.
Lo del paraguas para cigarros es posiblemente (sin contar con la cara de Jorge Javier Vázquez) la cosa más ridícula que he visto en mi vida.
Yo tengo el golf ese….que no sirve para nada XD
Los grandes inventos del TBO
Los grandes inventos del TBO fue una sección humorística fija del semanario de historieta TBO a partir de 1943. El título de la sección variaba ligeramente en las diferentes entregas de la revista: Grandes Inventos, Inventos Prácticos o Grandes Inventos Prácticos eran algunos de sus encabezados. En ella se describían pormenorizadamente inventos estrafalarios, a veces sumamente complejos, con una finalidad banal.
Trayectoria editorial
La idea de la serie partió del director de la revista, Joaquín Buigas, y el primer dibujante en llevarla al papel fue Nit, durante los 40. Un precedente de esta serie en el cómic clásico de Estados Unidos puede encontrarse en la serie Inventions of Professor Lucifer Gorgonzola Butts, creada por Rube Goldberg.
Luego la dibujarían autores como Tínez (en los 50), Benejam, Francesc Tur y Sabatés (en los 60) Hay que tener en cuenta que tanto Nit como Sabatés eran peritos mecánicos, por lo que lograban dar a sus inventos cierta credibilidad (de hecho, Sabatés llegó a construir alguno de ellos). La sección estaba presentada por un personaje ficticio, el profesor Franz de Copenhague.
Algunos de los ingeniosos inventos del TBO fueron:
Dispositivo para hacer vino con zapatos viejos (Nit)
Procedimiento para descargar mercancías con jirafa (Nit)
Coche salta-vallas (Nit)
Aparato limpia-narices (Nit)
Huevos con cáscara de cristal (Benejam)
Melones cuadrados (Benejam)
Sombrero-jaula (Tur)
Dispositivo anti-cabello en la sopa (Sabatés)
Artilugio para brindar en mesas grandes (Sabatés)
Legado
La popularidad de esta sección llegó a quedar hasta en el lenguaje coloquial, con la frase «es un invento del TBO» para tachar a una idea de estrafalaria o absurda. También dio lugar a series similares en la competencia, como Inventos práctico-deportivos del profesor Kal-Abacete en «La Risa».1
Alguno de estos inventos ha sido llevado a la práctica, por ejemplo, el de los melones cuadrados (en realidad, sandías o melones de agua), con el fin de que tomen la forma de cajas para embalaje.