El Informe Global sobre la Corrupción realizado por la ONG Transparencia Internacional (TI), ha dejado como saldo para España el puesto 28. Por lo tanto, ha caído seis puestos desde 2004 en el Índice Global de Percepción de la Corrupción.
El motivo de esta variación es la corrupción urbanística. Esta causa ha dejado a España junto a Qatar, San Vicente y las Granadinas en el puesto 28 de un total de 180 países, con una valoración de 6,5 puntos.
Según el presidente de TI en España, Jesús Lizcano, la corrupción urbanística «ha aflorado» mucho más que años atrás gracias a » la actuación de los jueces, las fuerzas de seguridad y los medios de comunicación».
Sin embargo, y ha pesar del empeoramiento en el ranking mundial, se ha avanzado significativamente con la legislación sobre delitos urbanísticos y la nueva unidad de la Guardia Civil creada para perseguir este tipo de crímenes.
Según palabras de Manuel Villoria, miembro de la organización, «ha habido un avance relativo con la Ley de Contratos del Sector Público, así como con la Ley de Financiación de los Partidos Políticos», aunque ésta sigue presentando carencias importantes.
El presidente de TI en España puso como ejemplo a seguir a los países nórdicos, donde existen mayores niveles de educación al respecto y cuyos habitantes «denuncian a familiares cuando ven que hacen algo mal».
Por último, la ONG advirtió de que la corrupción es un problema «claramente alarmante en el sector privado», donde además «se está generalizando».