Una de las claves básicas en el desarrollo de cualquier pyme, sin ninguna duda es la financiación. Estamos ante un caballo de batalla que, además, ha sido y es una de las principales preocupaciones de los empresarios de pequeñas y medianas empresas en nuestro país, mediante el cual, no toda la banca responde del mismo modo. En el caso de BBVA encontramos respuestas interesantes y satisfactorias como veremos a continuación.
El conjunto de la financiación pyme de BBVA se basa en algo tan importante como responder a las demandas reales de las pymes. Y es que esto, como concepto es verdaderamente notable, no es la empresa la que se debe adaptar a las condiciones rígidas de financiación, contrario en este caso vemos como es la propia entidad financiera quien busca responder a la demanda real de la empresa.
Por ello los ejes fundamentales de respuesta ante la necesidad de financiación se encuentran presentes en las herramientas que BBVA pone a disposición de las pymes. Elementos como unas buenas condiciones de acceso a la financiación, un proceso ágil, las menores trabas posibles en cuanto a aspectos documentales y burocráticos, y, por supuesto, un proceso de acompañamiento y asesoramiento profesional.
La entidad pone a disposición de la empresa la figura del gestor de PYMES, una figura que además no se moviliza en solitario ya que tiene a su disposición el apoyo de especialistas con los que podrá realizar las operaciones totalmente a medida para la empresa, en los diferentes segmentos o sectores.
En este punto queremos detenernos especialmente. Interesa mucho el modelo de relación entre el banco y pyme, ya que, en este caso vamos a encontrar una de las demandas más extendidas de la pequeña y mediana empresa que es la personalización de la gestión de la financiación, pero, mucho más allá del momento puntual. Es decir, la entidad en este caso entiende cada operación de financiación como única y cada cliente como único, con sus características, necesidades y realidades personalizadas.
Podríamos pensar que para esto el nivel de exigencia documental o de información que la entidad para exigir es enorme, y sin embargo, al contrario, es el mismo al que habitualmente estamos acostumbrados, sin embargo, con la particularidad de apoyar al máximo la agilidad en la gestión, entendiendo en esto una de las necesidades más importantes de la empresa.
(En BBVA solicitamos la misma información que cualquier otra entidad financiera, ni más ni menos que otros, pero nos caracterizamos por facilitarle lo máximo posible la gestión a nuestros clientes, indicando desde el primer momento qué es necesario, lo cual cambiará lógicamente en función de si es una empresa con la que ya trabajamos y tiene un alto grado de vinculación, o si se trata de una empresa absolutamente desconocida para nosotros).
A todo lo anterior, ese concepto de financiación rápida, personalizada, asesorada desde el primer momento y bien dirigida, debemos sumar unos precios verdaderamente competitivos para nuestro mercado, lo que en conjunto y con las tradicionales garantías de BBVA, nos sitúa ante un modelo de financiación pyme con el que debemos contar sin duda.