Aunque aun estamos en shock con respecto a una crisis sanitaria tan inesperada como brutal, lo cierto es que las reflexiones sobre el futuro no dejan de aparecer. Y del mismo modo que cobra fuerza en las finanzas la certerza de la importancia de Fintech, el concepto de finanzas sostenibles parece abocado a crecer cada vez más.
Se trata de un tipo de finanzas que tienen muy en cuenta temas como el medio ambiente e injusticias sociales en el momento de invertir, algo que tiene como consecuencia un cambio de perspectiva en el mundo de las finanzas. Apenas están comenzando y todavía no han obtenido la rentabilidad esperada, pero van por el buen camino.
En los últimos datos publicados sobre este tipo de finanzas, se revela que los activos sostenibles llegaron a suponer en 2018 el 45% de la cuota de mercado. Teniendo esto en cuenta, la Unión Europea se ha visto interesada por controlar este tipo de finanzas. Cabe destacar que hace poco se anunció que para el año 2050, dispondrá de una economía totalmente exenta de carbono, además de que anima a otros Estados a sumarse a esta iniciativa.
Sin ir más lejos, en el Tratado de París alrededor de 200 países dieron su firma para comprometerse de manera más seria con el medioambiente, puesto que la situación se agrava por momentos. De hecho, cada vez son más los países comprometidos con el calentamiento global, así como grandes compañías o Bancos Centrales, que estudian la mejor manera para cumplir con sus objetivos, siendo mucho más respetuosos con el planeta.
Entidades financieras y sostenibilidad
Las entidades financieras son de gran importancia para las finanzas sostenibles. Los bancos cada vez se encuentran más inclinados al cambio, desde mejoras tecnológicas hasta medidas que resulten sostenibles con el medioambiente. Los expertos señalan que las finanzas sostenibles son las que integran esa nueva visión y los criterios ambientales, sociales y de gobernanza en la estrategia del negocio.
Por lo tanto, hablamos de un tipo de finanzas que resultan cada vez más atractivas para todos, tanto usuarios como entidades o grandes organismos. Y es que cada vez somo más conscientes de que si no realizamos cambios pronto, el cambio climático empeorará todavía más. Esta conciencia sobre el medio ambiente tiene como consecuencia una serie de análisis y estudios para poder proceder de una manera mucho más ecológica.
Haciendo hincapié en la importancia que le da la Unión Europea a todo esto, hay que mencionar que sus expertos ya han calculado que será necesario recaudar 180 mil millones de euros a través de inversiones del sector industrial y empresarial, por lo menos en la próxima década, para llevar a cabo la transición energética.
También será importante calcular la huella de carbono que suponen todas las actividades que se realizan hasta el momento y planificar una descarbonización de los balances. Todas estas medidas forman parte de los objetivos que hay que asumir para dar el paso, que tan necesario es, hacia una economía sostenible.
En resumen, las entidades bancarias también están tomando la iniciativa pertinente para reducir el impacto de la contaminación en nuestro planeta, algo que están consiguiendo por medio de las finanzas sostenibles.
