La crisis del coronavirus, y el uso masivo de recursos online está siendo una buena prueba de esfuerzo no solo para los servicios financieros tradicionales en su versión online, también para Fintech.
Actualmente, nos encontramos en un momento de cambio para las finanzas, que no se hubiera podido concebir sin la crisis financiera de 2008. En ella, autoridades de todo el planeta decidieron arriesgarse para tratar de proporcionar modelos económicos más seguros para los usuarios.
Al mismo tiempo que las autoridades reguladoras ponían en marcha métodos con los que poder inyectar capital en los bancos y tratar de frenar la crisis, se estaba gestando una nueva manera de ver la economía. Se trata de un modelo seguro para las finanzas, y mucho más sencillo y beneficioso con los usuarios de lo que se había visto hasta el momento.
Las mejoras que ha supuesto y va a suponer el Fintech en el mercado
Dos de las principales mejoras que ya ha supuesto el Fintech en el mercado financiero, sin duda alguna, son la reducción de costes y la calidad de los servicios financieros. Se dejan completamente de lado los costes rígidos de los que hasta ahora había hecho uso la banca, para realizar una mejora notable en calidad y costes.
La distancia entre los intereses también es un concepto que está mejorando muchísimo, ya que la banca tradicional dispone de unos intereses mucho más elevados que los que ofrecen el fintech.
Todas ellas son mejoras que, aunque no supongan el fin de la banca tal y como la conocemos, sí que la obligan a replantearse unas cuantas cosas respecto al funcionamiento que ha llevado hasta ahora.
En cuanto al tema de la financiación, el fintech ha revolucionado por completo los modelos de evaluación de riesgo, creando uno mucho más inteligente y eficiente de lo que ya eran. Existen interpretaciones de todo tipo, pero por norma general son abiertas y siempre se apoyan en los datos en red. Disponen de una ventaja importante respecto a los sistemas de evaluación tradicionales, que sólo se basaban en puntajes crediticios.
Además, los préstamos entre personas se han disparado. Se trata de una muy buena noticia para todos los usuarios, pero en especial va a ayudar a pequeñas empresas y personas que necesiten financiación y no puedan contar con la ayuda de las entidades bancarias.
También es importante tener en cuenta que es mucho más rentable la evaluación del riesgo a partir de datos online, que una realizada por un agente personal, que por ende va a ser más caro y se va a basar únicamente en un análisis crediticio tradicional.
A causa del enorme terreno que se ha ganado el fintech en pocos años, la banca tradicional se plantea cada vez más el tipo de relación que mantiene con sus clientes y cada vez hacen mayor hincapié en mantener una cercanía con los usuarios. Todavía no podemos hablar de que el fintech pase por encima de la banca, a día de hoy aún le queda mucha trayectoria por recorrer, pero todo apunta a que va por buen camino.
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