La crisis económica provocada por la pandemia de Covid-19 ha dejado a la economía europea en una situación bastante complicada.
Se prevé que la recuperación va a ser mucho más lenta que la de otros países. Por ejemplo, Estados Unidos, que conseguirá cierta estabilidad financiera gracias al estímulo fiscal de emergencia otorgado por el nuevo presidente, Biden.
Europa, muy por detrás de Estados Unidos o Reino Unido
Mientras tanto, Europa se enfrenta a una situación cada vez más complicada al tener más restricciones a causa del aumento de los contagios, al mismo tiempo que debe lidiar con la lenta vacunación de la población. Un aspecto que dificulta todavía más la tan esperada recuperación, tanto desde el punto de vista sanitario como económico.
De esta manera, es del todo imposible que la zona euro consiga emular a Estados Unidos y obtenga un paquete de ayudas del mismo calibre, haciendo a su vez que el Fondo de Recuperación y Resiliencia prospere rápidamente. Otro de los obstáculos que impiden una mejora económica similar a la estadounidense, son todas las complicaciones políticas que se están dando.
Aunque estas se pudieran resolver de cara al próximo otoño, el repunte económico que se generaría no sería suficiente para llegar al mismo nivel que en EEUU. La única opción que nos queda, por el momento, es mantenernos a la espera de que se lleve a cabo una aceleración en los desembolsos que ya se encuentran comprometidos.
En este sentido, es importante tener en cuenta que durante el año anterior, los denominados países frugales no tuvieron más opción que aceptar el principio de mutualización de la deuda generada por la crisis. Es decir, si hubiera que aumentar la cantidad sobre el paquete ya acordado, probablemente se negarían hasta comprobar por sí mismos que no les queda más remedio que volver a ceder.
Sin duda alguna, este tercer trimestre va a ser decisivo para la recuperación económica europea. Al ritmo al que vamos con las vacunas, lograr alcanzar una inmunización colectiva para los meses de verano, se presenta como un reto bastante difícil de conseguir, dadas las circunstancias en las que nos encontramos actualmente.
Y es que existe un problema de vacunación muy evidente. Realizando una comparación sobre el número de dosis que se ha recibido por parte del sistema sanitario dentro de las principales economías de la zona euro, podremos darnos cuenta de que la que más dificultades está experimentando es Alemania.
No obstante, ya se ha hecho uso del 80% de las dosis de vacuna que se encontraban disponibles. En otras palabras, ni aunque se hubiera conseguido alcanzar el 100%, seríamos capaces de igualar o llegar siquiera al nivel de Estados Unidos, o incluso de Reino Unido.
En definitiva, la Unión Europea se encuentra con un importante problema respecto al acceso de las vacunas. Los expertos no ven posible alcanzar una inmunidad colectiva para el verano, dado el aumento de contagios y la lentitud que se tiene en el proceso de vacunación.