Que los tipos negativos ya alcanzaban a los depósitos es algo que conocíamos hace tiempo, y que, sobre el papel, hacía referencia a los grandes depositarios y ahorradores, y en entornos como el norte de Europa. Sin embargo, el anuncio recientemente realizado por un banco danés, iba más allá ya que, de manera implícita, mostraba el rechazo a que los clientes contratarán depósitos en la entidad, ofreciendo unos tipos negativos agresivos.
Recientemente la entidad financiera danesa Danske Bank anunciaba una penalización aún mayor a la que ya venía aplicando a los depósitos para los ahorradores, y, no estamos hablando de los grandes ahorradores, sino a cualquier modelo de depósito a plazo. La entidad lo comunicaba citando además el hecho de sugerir la no contratación de estos productos a sus clientes en función del gasto que podían generar. Sin embargo, esto no ha caído en saco roto ya que ha provocado una reacción en cadena, que inició el propio gobierno danés calificando avariciosos a los bancos que aplicaban estas políticas agresivas anti ahorro.
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Los tipos de interés negativo
Debemos clarificar que estamos en un escenario en el que ya desde hace varios años se vienen aplicando tipos de interés negativos. Inicialmente, se hacía referencia a los grandes depositarios y a las penalizaciones que estos podrían sufrir en un entorno de rentabilidad baja, en la que se cobraría por guardar el dinero. Sin embargo, paulatinamente, y en el caso de Dinamarca, las entidades financieras fueron haciendo más agresivas sus políticas. Si tenemos en cuenta que el propio banco nacional de Dinamarca que aplica una tasa negativa del -0,5% al exceso de liquidez de los bancos comerciales, podemos entender que las entidades financieras no desean tener dinero aparcado, ya que les genera costes.
Esta política por parte del Banco Central danés tenía como objetivo estimular la financiación, es decir, que los bancos dejarán de tener dinero inmovilizado y lo movilizarán en créditos y préstamos. Pero, la política está generando más problemas en relación a la inmovilización de ahorro por parte del usuario, que no quiere ver su dinero penalizado, que ventajas en cuanto a un aumento notable de la financiación.
Todo este embrollo, se traducía con el anuncio por parte de la citada entidad Danske Bank de que también comenzaba a cobrar interés negativo al cliente minorista. La traducción a este anuncio era que aquellos clientes con menos vinculación con la entidad pagarían una penalización independientemente de la cantidad de dinero en depósito en el banco. Esta tasa negativa sería del 0,6% anual. Para hacernos una idea, hasta este anuncio, el tipo negativo se aplicaba solamente sobre depósitos por encima de los 33.000 €, ahora, los tipos negativos se aplicarán a depósitos de 13.000 €, aplicando un 0,6% anual. También, la entidad a introducir un diferencial de tipos de interés desde el -0,75% al menos 1% anual para las empresas y clientes comerciales.
Sabíamos, porque ya nos estamos acercando en el resto de Europa, que los tipos negativos habían llegado para quedarse, lo que no esperábamos, o al menos los analistas no presumían que ocurriera de manera tan rápida, es que los tipos de interés se aplicará también a minorista y lo hiciera de una manera tan agresiva. Falta por ver si la respuesta del gobierno danés, es lo suficientemente dura como para que la entidad recurre, o si el resto de entidades del país se suman a estas políticas tan agresivas de penalización del ahorro.
