Cuando hablamos de crisis, sostenemos que todos estamos pasando por un mal momento. Que a las familias les cuesta llegar a fin de mes con unos euros extras, que el gobierno no recauda de manera sostenible para mantener el sistema, y que las empresas despiden personal, tienen descensos abruptos de ventas y pérdidas considerables.
Pero a pesar del momento difícil que vive España, con una huelga sin parámetros en los últimos tiempos, la banca, uno de los sectores que primero evidenció las consecuencias de las turbulencias financieras, ha expuesto números en alza.
Según la Asociación Española de Banca (AEB), los estas entidades ganaron 5.153 millones de euros en el primer trimestre de 2008, por lo que han incrementado sus beneficios en un 10%.
Lo interesante de la cuestión es que mientras la banca internacional sufre perdidas sin precedentes, la banca española refleja numeros que se contraponen con la actualidad que la rodea.
Sin embargo, los índices de morosidad en el primer trimestre se han incrementado hasta el 1,20%, frente al 0,91% del mismo periodo del año anterior.
A pesar de estas cifras, A pesar de este incremento, la Asociación Española de Banca sostiene que se encuentra en «mínimos históricos», tanto a nivel individual como consolidado y descartó que se traten de incobrables.
En lo que respecta a los créditos a clientes, han crecido un 8,8%, en el primer triumestre de 2008 hasta llegar a los 1,16 billones de euros, y los depósitos ascendieron 6,5%, con cifras totales de 757.054 millones de euros por dos moticos, el traspaso de los fondos a los depositos y el traslado de dinero de una entidad a otra con mejores condiciones.
En lo que respecta a las comisiones netas, han caido un 7,5%, hasta los 1.849 millones de euros, directamente influenciadas por el retroceso del mercado de valores.