Ante el repunte de la compraventa de viviendas en un 18,7% interanual en Febrero, vale aclarar que todas las viviendas que se han vendido nuevas o usadas, previamente sufrieron un ajuste medio de más del 20%.
La vivienda de segunda mano registró una baja de cerca del 30% desde 2006 y algunos remarcan a que los vendedores deben de bajar el precio o de lo contrario no las podrán vender ni en el corto ni en el medio plazo.
Por otro lado, si bien existen condiciones ideales para adquirir una vivienda, responden que no queda mucho más para ajustar los precios.
En opinión de algunos agentes inmobiliarios, este aumento de ventas se da a partir de la baja de los precios además de la mejora de las condiciones de financiación, por el bajo nivel del euribor. Así como la banca concede más hipotecas, pero el volumen total prestado baja ante la caída de precios y debido a que financian un porcentaje menor del importe total de compra. Pero aún existe la resistencia por parte de propietarios a bajar sus precios y ajustarlos al actual mercado.
