Imaginarse un año atrás, que los grandes bancos europeos estarían pasando uno de los momentos más difíciles de los últimos tiempos, y con números en rojo, sería casi impensado.
La crisis de las hipotecas de alto riesgo en Estados Unidos, ha dejado un tendal de inconvenientes para la gran banca europea, y el descenso de sus beneficios en el primer semestre de 2008 ha llegado al 61,8% (23.607 millones de euros), todo un récord.
Para tomar noción de este panorama de caos financiero, los dieciséis bancos más grandes del continente, han presentado un descenso en sus beneficios, a excepción de Santander, que ha logrado mejorarlo un 6,1%.
Vale recalcar que, Intesa Sanpaolo, segundo banco italiano, y Crédit Agricole, tercer banco francés en bolsa, no han presentado sus resultados públicamente.
Esta isla que conformó la entidad presidida por Emilio Botín, no tiene relación con el resto, que no sólo han presentado caídas en sus resultados (entre un 7,9% y un 87,1%), sino que algunos como UBS y Credit Suisse y Royal Bank of Scotland (RBS), segundo banco británico, han reflejado pérdidas.
Un dato interesante que distingue a la banca española del resto de Europa es que las entidades que operan en el resto de los países necesita desviar dinero para cubrir las pérdidas ligadas a la crisis (29.400 millones de euros).
Para reducir el impacto en sus balances, la banca ha tomado dos caminos paralelos, por un lado ha puesto en marcha un plan de venta de activos y compra de negocios en mercados emergentes con el fin de generar ingresos.
Por otra parte, ha comenzado las restructuraciones internas, tendientes a bajar los costes ha través del recorte de empleados.
Barclays, Deutsche Bank, UBS, RBS, Lloyds o Credit Suisse han recortado gastos entre un 1,4% y un 23,9% y UBS ha despedido al 2,8% de su personal en tres meses (2.387 empleados) y prevé llegar a los 5.500.
La banca, por sector
La banca corporativa y de inversión soporta el impacto de estas provisiones y la merma en el negocio y el descenso de movimientos corporativos. Este es el ejemplo de bancos emblemáticos como UBS, Credit Suisse, Deutsche Bank, UniCredit o Société Générale que reflejan pérdidas en este sector.
Sin embargo, en el negocio de banca de particulares, los resultados son otros. Un alza considerable por el momento que soportan, han vivido Santander, BBVA, Lloyds, Commerzbank y Barclays, con ganancias entre 7% y 15,5%.