El Gobierno brasileño se encuentra finalizando un plan con el objetivo de extender el acceso a Internet de banda ancha a todo el país, en un plazo máximo de cinco años. Este proyecto requerirá una inversión de 10.000 millones de reales (3.836 millones de euros).
Por su parte, el proyecto necesitará la complementación de los sectores público y privado en consecuencia de que el Gobierno no tiene una compañía con la estructura ni experiencia suficiente para administrar un negocio de este tamaño. Asimismo, el titular de la cartera de Comunicaciones confía en que se sepa aprovechar la infraestructura privada que existe en el país y se opte por el modelo mixto.
El Gobierno ofrecerá incentivos tributarios y financiación con lo que beneficiaría a más de 40 compañías de telecomunicaciones que operan en Brasil. Cabe mencionar que actualmente solo el 5,2% de la población brasileña tiene acceso a Internet a través de banda ancha.
Serán llevadas a cabo dos rondas de subastas de telecomunicaciones durante el primer trimestre de 2010. Se ofrecerá la frecuencia Wimax usada para el acceso de banda ancha, y la de 450 MHz, para que dé cobertura a los teléfonos móviles en las zonas rurales.
