Mientras la preocupación de otros países pasa por hacerle frente a sus deudas, el de solicitar o no un plan de rescate y reducir el déficit. China que lidera el ranking de economías mundiales, afronta un problema mucho más grave a futuro y dada su tamaño de su población ya que vive su peor sequía de los últimos 50 años.
Puede verse por las diversas imágenes satelitales como el norte, el centro y el este de China sufren esta sequía viendo como sus cultivos están desapereciendo junto a ciertas materias primas agrícolas.
Un dato que es solamente una muestra son los 250.000 chinos que se quedaron sin agua potable y que la reciben de camiones de bomberos. A lo que se suma el problema con ciertas materias primas considerando que China es gran consumidora de alguna de ellas.
Se prevé que unos 2,2 millones de ciudadanos chinos afrontan la posibilidad de quedarse sin agua corriente en todo el territorio chino, esto generado por el drástico descenso de lluvias entre un 20% y un 90% respecto a similar período de 2010.
Ya se registra el dato que hasta un 17% de las cosechas de trigo fueron afectadas por la sequía. Lo que también podría generar además ciertas subidas de precios de algunas materias primas.
Incluso algunos acusan a la sequía de generar la alta inflación que registra China, ya que durante el último trimestre alcanzó el 4,6%. Puede verse como los alimentos registran una subida en 2010, de un 7,2%, y se estima que llegue al 15% durante el primer semestre de 2011.
Nada mejor habla que Beijing la capital china, en la que ya son más de 3 meses que se han olvidado del concepto de la lluvia. Siendo invierno y que no llueva o se vea como cae nieve.
Un ejemplo es lo que se da en la provincia de Shandong, dónde unas 2 millones de hectáreas, el 56% de su producción, se perderá por esta situación. Ni que hablar de las ciudades como Jining en el sur, que sufren su peor sequía de los últimos 200 años.
Dentro de una situación desesperada el gobierno chino implementaría una medida también arriesgada, ya que desviaría el agua del Río Amarillo al norte. Aunque expertos estiman que igualmente Beijing requeriría de 190 millones de metros cúbicos más por año sobre todo con el traslado cada vez más masivo de la población rural hacia esta ciudad.
Ante ello se espera medidas de carácter demográfico, debiendo controlar el incremento de la población y el traslado hacia las ciudades.
El problema que generaría la sequía traería aparejado un incremento en los precios de la carne, granos y vegetales provocando serios problemas de consumo.
Imagen: despiertaalfuturo