La administración de tus finanzas no es tarea fácil. Es posible que en algún momento de tu vida gastes más dinero del que puedes pagar y esto te motive a buscar cómo conseguir dinero rápido y fácil en un día; sin pensar en las implicaciones económicas que podrían generarse para tu estabilidad futura.
Sin duda, cuando necesitas dinero de forma inmediata no sueles detenerte a leer algunas de las letras pequeñas que son parte de créditos rápidos, sencillamente consideras que es una oferta que te brinda toda clase de facilidades y beneficios, para su posterior pago.
Pero debes saber que en su mayoría este tipo de préstamos implican a la larga un gasto mayor, pues finalmente se trata de un mecanismo utilizado por las entidades financieras para obtener recursos extras a sus propias inversiones.
Todo lo que en un principio te parece rentable, podría no serlo cuando descubres que deberás pagar intereses elevados, algunas penalizaciones de mora y cualquier otro desembolso que sea parte de esas letras pequeñas a las que no prestaste atención, lo que en suma termina por ser una cantidad superior a lo que recibiste en crédito.
¿Cuáles son los productos financieros de mayor riesgo?
La mayoría de las personas cuando necesitan dinero, piensan en obtenerlo a través de una entidad financiera antes de seguir cualquier otra alternativa, ya que se trata de algo que está al alcance del público en general.
Como parte de las políticas de estas entidades se ponen a tu disposición ofertas de inversión cuyo riesgo económico puede ser muy variable, en función del hecho de que cada producto cuenta con sus propias cualidades, algunas idóneas para que puedas conservar la riqueza que generas y otros con la particularidad de generar un aumento de tu patrimonio.
En este orden de ideas es posible mencionar el caso de las inversiones identificadas como CoCo’s, consideradas entre las más actuales respecto a préstamos bajo el nombre de bonos, implementados por la banca con la finalidad de alcanzar un incremento en su gestión financiera.
Cualquier persona puede adquirir este tipo de préstamo que posteriormente podría ser considerado como una acción en la entidad, pero en función de algunas circunstancias, porque si bajan las reservas del banco te obligarán a convertir tu deuda en acciones de capital, lo que implica que ellos siempre tienen el control.
Muchos otros productos financieros implican la presencia de un riesgo de trasfondo, como es el caso de las inversiones en fondos garantizados, cuya cobertura total no siempre se respeta y en algunos casos llega a pagarse solo el 75%.
De forma similar, entre los productos financieros más peligrosos pueden estar los swap, donde se manejan las fluctuaciones de los tipos de intereses a favor de una de las partes. En cuyo caso es posible que adquieras un préstamo por un precio demasiado alto y que los intereses del mismo no te sean rentables.
Otro interesante caso lo encontrarás con los warrants, que no cotizan dentro de un mercado regulado, de manera que tus intereses no estarán garantizados por la cámara de compensación.
Peligros de obtener un crédito rápido
Al solicitar un crédito de forma rápida es posible que posteriormente sufras de incrementos en tu deuda a causa de la falta de información en cuanto a sus condiciones de financiamiento, entre las cuales mencionamos las más frecuentes:
Intereses abusivos
Todo se ve muy bien al recibir tu préstamo, pero luego te das cuenta de que los intereses se incrementan vertiginosamente, llegando a márgenes entre el 30% y 50%. Esto, lógicamente, incrementa considerablemente el valor de tu deuda, por lo que debes estar atento y analizar muy bien en qué entidad solicitarás tu crédito.
Penalizaciones
Si te retrasas en tus pagos o en la presentación de la documentación que te sea exigida, podrían imponerte penalizaciones que aplicarán sobre el monto de los intereses que tienes por pagar, lo que terminará por duplicar tu deuda.
Condiciones poco visibles
La mayoría de las personas no leen la letra pequeña de algunos documentos, por considerar que se trata de material de relleno, pero no es así. Ya que puede tratarse de una cláusula mediante la cual se establecen compromisos que igualmente están aceptando al firmar el préstamo.
Lo más recomendable es que analices minuciosamente su contenido antes de firmarlo e incluso te puedes asesorar con algún experto en este tipo de servicios, para evitar que te tomen desprevenido.
Poco tiempo de plazo
La mayoría de los créditos rápidos están caracterizados por contar con poco tiempo para su devolución, algunos de ellos incluso en menos de 45 días. Esto es un elemento que debes tomar en consideración para evitar sufrir una alteración de tu presupuesto, antes de lo esperado.
Presentar un aval
Algunos créditos requieren la presentación de un aval para ser otorgados, detrás del cual puede estar tu coche o vivienda, lo que implica que si no pagas la deuda dentro lo establecido en el contrato, podrías perder tu propiedad.
No seas víctima de los productos financieros que representan un riesgo, cuando necesitas de dinero de forma rápida. Lee muy bien en qué te estás metiendo y firma sólo si te resulta rentable, tanto ahora como en el futuro.