¿Cuáles son los criterios para otorgarte y denegarte un préstamo?

Antes de solicitar un préstamo es necesario saber cuáles son los requisitos necesarios para pedirlo. Pero una vez solicitado, ¿en qué se basa una entidad financiera para otorgarte o denegarte el préstamo? Esto depende de dónde se pida, ya que el proceso es muy diferente dependiendo de si se solicita a una entidad bancaria, o si se solicita a uno de los proveedores de préstamos online.

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Pedir un préstamo a un banco: qué supone

El proceso es más laborioso y largo que pedirlo online. Una entidad bancaria requiere de una documentación que muestre que el solicitante es solvente. Para mostrar esta solvencia se piden nóminas o justificantes de ingresos, vida laboral, escrituras de propiedad y avales. En este último caso, el avalista debe demostrar con sus bienes o ingresos la devolución de la deuda. El solicitante y el avalista, deben responder de forma solidaria ante el préstamo, es decir, si uno no puede hacer frente al pago, lo debe afrontar el otro. Esto hace que el avalista tenga las mismas responsabilidades que la persona que ha recibido el préstamo. Además, según el Banco de España, el que pide un préstamo responde ante su deuda con todos sus bienes presentes y futuros.

Una vez presentada la documentación, el personal de la entidad bancaria (normalmente el director) es el responsable de valorar si la persona puede o no hacer frente a la deuda que va a contraer si se aprueba el préstamo. Los datos en los que se basan son el tipo de contrato laboral, la edad, situación familiar, etc. Por norma general, la cuota mensual del préstamo no debe superar el 30%-40% de la nómina mensual. Si la entidad considera que el solicitante tiene un elevado coeficiente de riesgo, entonces denegará el préstamo o pedirá que presente un avalista.

Pedir un préstamo online: un proceso diferente

Al pedir un préstamo por internet, el proceso es más automatizado. No es necesario que desplazarse a la entidad bancaria y ninguna persona física va a requerir papeleo ni va a decidir sobre la concesión del crédito.

Las empresas proveedoras de créditos usan por lo general unos algoritmos automatizados que estudian la solvencia del solicitante en base a los datos indicados por este en la solicitud online. Basándose en datos personales como la situación familiar, laboral o incluso en el comportamiento del usuario en las redes sociales, deciden si esa persona es apta para recibir un préstamo con la responsabilidad que esto conlleva.

Los datos aportados online a través de un pequeño formulario son ponderados por el algoritmo de estas empresas sin que sea necesario adjuntar ninguna documentación. Los préstamos sin documentación son aquellos en los que el usuario simplemente rellena el formulario online, introduciendo datos personales, pero sin tener que adjuntar o enviar en ningún caso documentos físicos. Ya son muchos los proveedores de préstamos online que realizan su proceso de esta forma, especialmente cuando se piden cantidades pequeñas de dinero.

La rapidez de este trámite no puede competir con el proceso descrito anteriormente con la banca tradicional. Por esto muchas entidades ya están subiéndose al tren de la digitalización y explorando nuevas vías para dar a los usuarios un servicio de calidad a la vez que rápido.

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