A pesar de algunas señales positivas de la economía mundial, Estados Unidos sufre una nueva caída en la riqueza neta por hogar, dicha baja fue de unos 1,3 billones de dólares en el primer trimestre con lo cual ya llega a 14 billones de dólares de caída consecutiva en lo que va de los últimos siete trimestres, según datos aportados por la Reserva Federal.
Estas cifras reflejan lo sucedido en el primer trimestre del año, donde además el valor neto de las viviendas cayó a una tasa anualizada del 9,9 % y llegó a 50,4 billones de dólares, la cifra más baja en cuatro años.
La riqueza neta está conformada por el balance de los activos y pasivos en el hogar, que había llegado a su punto máximo de 64,4 billones de dólares durante la primavera del 2007 y en los seis meses siguientes dio comienzo a la peor recesión económica en más de cinco décadas.
Desde ese punto máximo de riqueza las familias de EE.UU. vieron perder el 22% del valor neto en sus hogares. Un porcentaje mayor se produjo en el cuarto trimestre del año pasado, dónde los hogares vieron caer 4,9 billones de dólares. Dicho informe también muestra que las empresas y los hogares han recortado sus deudas.
Mientras que la deuda del sector privado cayó a una tasa anualizada del 0,4% en el primer trimestre, es la primera vez que el sector privado disminuye en este punto desde que la Reserva Federal registra este dato desde 1952.
Los activos de los hogares cayeron entre enero y marzo en unos 1,4 billones de dólares incluyendo una pérdida por unos 448.000 millones de dólares en el valor de bienes raíces, más otra pérdida de 1 billón de dólares en sus inversiones en acciones, fondos de pensión y ahorros de jubilación.
Aunque los pasivos de los hogares disminuyeron unos 114.000 millones de dólares, cuando los consumidores redujeron sus deudas a una tasa anualizada del 1,1 %. La mora de los consumidores en concepto de tarjetas de crédito cayó a una tasa anualizada del 3,5% que es la mayor caída desde 1980.
El ingreso personal disponible tuvo un aumento, después de efectuarse el pago de impuestos, que en el trimestre subió un 5,4 % llegando a una tasa anualizada de unos 10,8 billones de dólares.