Como reza el dicho “siempre hay una primera vez” y Rusia está a punto de experimentar esa sensación ya que por primera vez en su historia, diversificaría sus reservas de divisas más allá del dólar y el euro, o de la libra y el yen. Incluirá a sus reservas dólares canadienses y australianos.
Esta medida estaría impulsada, debido a las fluctuaciones de dichas monedas, incluyendo para ello los dólares canadienses y australianos, siendo actualmente las terceras reservas internacionales del mundo, con 458.200 millones de dólares. Ya que el 47% de sus reservas se encuentran en dólares estadounidenses y un 41% en euros, la libra británica significa el 10% y el yen el 2% de las reservas.
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