El euribor, el indicador más utilizado para el cálculo de hipotecas, cerrará abril en el nivel más alto de los últimos ocho años, 4,8%.
De esta manera, las hipotecas se encarecerán cerca de 600 euros al año. Así, se continua con la tendencia que se eleva por segundo mes consecutivo después de que el mercado vea cada vez más lejana la posibilidad de que el Banco Central Europeo (BCE) baje los tipos e, incluso, contemple la posibilidad de una subida.
Tras marcar ayer su máximo anual diario en el 4,965%, todo indica que el indicador concluirá abril en los niveles de diciembre de 2000, cuando se situó en el 4,88%.
En enero, el euribor cerró en el 4,498%, un mes después perdió una décima y media más y terminó en el 4,349%. En marzo, el indicador cerró en el 4,590% y acabó con dos meses consecutivos de descensos.
Con los porcentuales de abril, para una hipoteca media de 150.000 euros a 25 años, las cuotas que se revisen anualmente se incrementaran desde los
Las hipotecas que se revisan semestralmente experimentarán una subida más moderada, de 16,62 euros mensuales.
Ello es así porque en abril del año pasado el euribor marcaba el 4,235 por ciento, y en noviembre, había subido hasta el 4,607 por ciento.