Desde hace pocos días los bancos y cajas de ahorros están aplicando el nuevo sistema de comisiones que entre otras cosas permite cobrar a sus clientes cuando reciben transferencias que generan a la entidad receptora algún tipo de coste adicional, como pueden ser los traspasos en los que los datos sean erróneos o incompletos.
Por suerte no se aplicarán estas comisiones a las nóminas, pensiones, devoluciones de impuestos o ejecuciones de deudas administrativas, ni a las comisiones en hipotecas.
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