El tsunami y posterior terremoto en Japón hará algo más que arrasar con la naturaleza del lugar y las edificaciones, la amenaza que se cierne en Japón es sobre su economía.
Dicen que cuando se retira el agua y los restos y el temblor se calma se contemplan mejor los daños, y eso será lo que deberá contemplar el gobierno japonés y ver el estado de su economía interna que ya venía a los tumbos.
Japón hasta no hace mucho se ubicaba como potencia mundial en exportación de tecnologías y bienes de equipo actualmente el término recesión económica es algo que le toca de cerca junto a la deflación.
Los otros problemas que venían afrontando como la reciente dimisión del ministro de Exteriores y el primer ministro Naoto Kan y los sobornos de una empresa de Corea del Sur, se le suma las consecuencias que dejará el brutal terremoto y que resentirá las cuentas.
Además debe afrontar la apreciación del yen su moneda lo que ha hecho decaer sus exportaciones, algo que la hermana con España es el ritmo de crecimiento de su tasa de paro.
También deberá hacer frente aún más su altísima deuda pública algo que aumentará con el coste de afrontar la reconstrucción y la lastrará más todavía.
Algo que también sufrió las repercusiones del tsunami ha sido el índice Nikkei que al compás de las bolsas mundiales registró un descenso. Pudo verse que el índice Nikkei de la Bolsa de Tokio descendió en un 1,7% tras el terremoto.
Un alivio dentro ello es que el Yen le ha podido hacer frente ante el aumento del precio del petróleo en Japón y se mide con la reacción de otros países. Algo que puede verse ya que viene apreciándose en el último año frente a las divisas más importantes. Además de que el consumo de petróleo proviene prácticamente de afuera de Japón.
Algo que deberá el gobierno japonés es demostrar la histórica sabiduría de su pueblo y aplicarla para salir adelante a nivel económico y social de este desastre y reconstruir Japón ante el tsunami sobre la economía de Japón.
Fuente: LaVanguardia.es
Imagen: constanzanews