Una de las economías más importantes del mundo, Estados Unidos, sigue en graves problemas aunque algunos intenten bajar el nivel de los acontecimientos. Y sino basta con analizar los datos de marzo.
En ese mes, el índice de desempleo llegó hasta el 5,1%, es decir que se elevo tres décimas, el nivel más alto desde septiembre de 2005.
De esta manera por tercer mes consecutivo sube el desempleo se incrementó al registrar una caída de 80.000 puestos de trabajo no agrícolas, lo que supone su mayor descenso desde marzo de 2003.
Nada parece ser como vaticinaban los especialistas. La caída del empleo superó las expectativas del mercado que pronosticaban una pérdida de 50.000 mil puestos.
Además, el Departamento de Empleo ha revisado a la baja el dato de febrero, en el que se perdieron 76.000 empleos, y no 63.000 omo habían anunciado.
En resumen, en lo que va de 2008, la economía estadounidense ha perdido 232.000 puestos de trabajo, una media de 77.000 empleos menos cada mes con números más preocupantes en las manufacturas y construcción.
Si esto no es un signo fuerte de que se ha entrado en recesión, parece que estamos cerca de llegar.