Las listas de morosos recogen los impagos pasados de personas físicas y jurídicas, y pueden suponer un problema muy serio para cualquiera que esté incluido en ellas. Se trata de una herramienta que utilizan habitualmente los bancos antes de conceder un préstamos o crédito. En los últimos años, ha habido varias listas de este tipo con cierta popularidad en nuestro país. Es el caso, por ejemplo, del RAI, CIRBE o de la lista de la Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito (ASNEF).
Pues bien, estar incluido en una de estas listas puede suponer la denegación de entrada de un préstamo, y la imposibilidad de que una persona acceda a financiación, si bien hay muchas entidades, como kredito24, que conceden microcréditos también a personas que están registradas en estas listas.
Este tipo de entidades utilizan un sistema de evaluación más completo con el fin de determinar si la persona tiene la suficiente solvencia para devolver la cantidad en el plazo fijado. En ese sistema se evalúan varios factores, uno de los cuales es la verificación de listados de morosos como Asnef para saber si existen deudas anteriores. Sin embargo, no es el único criterio, de modo que se evalúan otros criterios que ofrecen una perspectiva mucho más amplia de la solvencia del prestatario, de modo que esté no queda vetado por una deuda que quizá ni recuerde.
Hay que tener en cuenta que la inclusión en estas listas no suele depender ni de la cuantía de la deuda ni de su certificación, aunque siempre debe tratarse de una deuda líquida, vencida y exigible. Es decir, basta un impago de una pequeña factura a la compañía de suministros, e incluso un impago que venga motivado porque no estamos de acuerdo con los conceptos liquidados, para que podamos vernos incluidos. No es impedimento haber reclamado o incluso reclamado judicialmente una liquidación de una supuesta deuda para que se nos incluya en una lista de morosos.
Hay más de cuatro millones de españoles incluidos en estas listas. Si estamos en una de estas listas, muchas entidades nos negarán las tarjetas de crédito, los préstamos personales o la concesión de una hipoteca.
¿Cómo darse de baja en la lista?
El primer paso para salir de una lista de morosos es saber si estamos en ella. Aunque parezca sorprendente, muchos no lo saben, porque la factura que no pagaron era de una cuantía mínima, u ocurrió hace mucho tiempo. Sin embargo, acuden a su banco y se encuentran con la denegación.
La entidad que solicitó la inscripción del usuario en el listado puede comunicárselo, pero muchas veces eso no ocurre. Para comprobar que efectivamente se está inscrito, se puede acudir a esa entidad o solicitar la información directamente a ASNEF.
El siguiente paso será solicitar la baja del fichero. Aquí nos encontramos con tres supuestos:
– Si has pagado tu deuda, deberás solicitar la baja a ASNEF en un formulario o por correo electrónico.
– Si han pasado seis años desde que te inscribieron en la lista, la deuda estará prescrita, por lo que también podrás solicitar que te excluyan del listado.
– Si la empresa no te notificó tu inclusión o si no estás de acuerdo con el importe, también puedes pedir la baja.
Por último, recuerda que siempre podrás pedir financiación a entidades que realicen una evaluación más amplia de tu solvencia, sin limitarte de entrada por el hecho de estar en la lista de ASNEF.