En varias oportunidades el Banco de España amenzó con intervenir cajas de ahorro por los números malos que reflejaban los balances de estas entidades, y comenzó con CCM y CajaSur.
Caja Cantabria, ya en 2008 era una de las entidades señaladas por el BDE. Un año más tarde, 2009 se ha transformado en un año nefasto para el sistema financiero español plagado de morosidad y menores ganancias.
Por eso, la entidad reguladora ha instado a las cajas de ahorro a que se fusionen, y ha puesto la mira sobre las cajas de ahorro en problemas.
Una de ellas, Caja Cantabria ha iniciado un proceso de fusión fría o virtual en un SIP que además conforman Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), Cajastur y Caja Extremadura.
Ver resultados en 2009, aquí.