Italia corre el riesgo de encaminarse a ser la nueva Grecia o al menos es lo que tratará de vitar Bruselas al haber puesto en posición de régimen de vigilancia Italia y al Gobierno de Silvio Berlusconi tal como ha pasado con Grecia, que si sirve de algo hay que tomarlo como el ejemplo de todo lo que no hay que hacer.
Es por lo que la UE recurre a solicitar la ayuda a los países emergentes y que estos contribuyan a evitar que Italia entre en riesgo y finalmente caiga; esto tiene una doble lectura que la propia Unión Europea se da cuenta de pedir ayuda y que la crisis es suficientemente grave como expandir el radio de ayuda más allá de lo que hasta ahora.
Actualmente la UE viene mostrando su incompetencia en medidas que puedan hacerle frente a la crisis del euro y dando vueltas alrededor de cómo funcionará y con cuanto dispondrá el fondo de rescate.
Lo que quiere evitarse es que en los próximos meses Italia sea captado por la fuerza de gravedad del agujero negro de la deuda lo que tarde o temprano colapsaría como Grecia.
Son horas, días y meses de definiciones para la UE y la zona euro, y por que no para el mundo, en la Cumbre de este 23 de Octubre una de las conclusiones es que se precisará el compromiso y ayuda de países emergentes junto a los inversores internacionales para que participen de los fondos de rescate de la zona euro que deben aprobarse.
En esta última cumbre Italia fue señalado como cual leproso al decir que es el principal riesgo de la zona euro, Italia ya posee 1,8 billones de deuda pública incluso y por la importancia de país y característica ese monto es hasta 6 veces la deuda de Grecia.
Tras esto se le impondrá una serie de exigencias al Gobierno de Silvio Berlusconi, y este deberá comprometerse a cumplir con el calendario que traerá nuevos ajustes algo que exaltará aún más los ánimos de los italianos. Se estima que se trata de tener que aplicar un ajuste presupuestario y una serie de reformas en el mercado laboral, además del sistema judicial y comprometerse a medidas frente a l fraude fiscal, receta similar a la de Grecia.
Si bien siempre ronda la posibilidad de planes de rescates, nadie quiere volver a tener que recurrir a esto ya pasaron por esta guillotina Grecia, Irlanda y Portugal y si se sumara Italia uno de los que son demasiado grandes para caer con solo mirar sus números, ha quedado en zona de máxima vigilancia, riesgos lejanos pero no por eso menos ciertos de pasar por un plan de rescate.
El reloj apura al Gobierno italiano y Europa para presentar una serie de nuevas reformas económicas y que su imagen tan tambaleante no sea la viva imagen de la torre de Pisa que estando torcida desde hace mucho se sabe que en algún momento caerá precisamente Italia necesita enderezar del todo su economía antes que esta caiga sin remedio.
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