Mientras unos apuestas por divisas como el yen y ganan otros precisamente su creadores Japón intenta que no sea un arma de doble filo, al tener una moneda fuerte tarde o temprano pasa factura.
Para esto el Gobierno de Japón ha puesto en marcha un mecanismo que le permite intervenir en el mercado de divisas y bajar el nivel del yen, para que no siga acercándose a su máximo histórico, lo que hace que intente depreciar el yen.
Una de las consecuencias y que no es tan noticia como la subida del yen, es como esto viene afectando a los exportadores de Japón.
Recordemos que la economía de Japón viene muy golpeada antes y en especial después del terrible tsunami y terremoto que debió sufrir además de la radioactividad que también trae consecuencias en algunos alimentos.
La escalada del yen
El yen viene aprovechando la caída de EE.UU y por ende su moneda el dólar, por su ya desmejorada economía y la quita de la triple A lo ha empeorado.
Ante la escalada que llega a tocar máximos esto podría dar lugar a los que señalan que Japón interviene el yen, y los mercados deberían de verse preparados para esta operación de su divisa.
Japón debería recurrir a algunas medidas para evitar que su moneda efectivamente alcance máximos históricos. Las medidas que estarían en estudio podría tratarse de la venta de yenes y lo que se llama aliviar su política monetaria del Banco Central Japonés, por ahora son especulaciones aunque se haría estimando la situación de los mercados.
Cerca de máximos históricos
La moneda nipona, el yen se situó en 76,29 dólares, quedando muy cerca del máximo histórico de (76,25 dólares) en marzo de 2011. Esto hace pensar que la divisa pasa por una revaluación demasiado fuerte.
Algunos consideran que el yen se encuentra alto y que de seguir así podría hasta causar daño a determibados sectores de la economía interna de Japón que ya en 2010 vivía preocupado por la deflación.
Qué hacer
No todos, pero algunos de los funcionarios japoneses creen que los mercados precisan de presión con la finalidad de que el yen pueda mantenerse en unos niveles que no sean alarmantes ni conflictivos para ninguna parte. Viendo que ambas partes, Japón y de la otra los inversores que buscan al yen como refugio pujan por unos ponerle freno a la subida de su moneda y otros sin importarles las consecuencias seguir invirtiendo alguna de las dos sladrá perdiendo por el efecto de la otra o retrocerder por decisión propia, algo que no entre en la mente del Gobierno japonés pero que tal vez el mercado deba relajar su presión sobre el yen.
Otro número en el que hay que fijarse es que el yen llegó a repuntar en un 5% en Julio esto sucedió al momento en que los inversores optaban por quitarse de encima de sus dólares para ingresar otros activos líquidos dado que podría bajar la calificación crediticia de Estados Unidos que venía siendo desmentido aunque se aprobó el techo de deuda. Lo que pasó después niega estas desmentidas.
Imagen: elsemanario