Por estos días se lleva a cabo la sexta edición de la Feria Internacional China de la Pequeña y Mediana Empresa (CISMEF), donde España será co-anfitrión de la feria, que reúne más de 3.000 empresas y más de 1.000 expositores de empresas extranjeras.
España posee un pabellón de 10.000 metros cuadrados, lo que significa el mayor despliegue realizado hasta ahora en una feria.
En tanto que el número de empresas chinas asistentes es de unas 1500, dando una oportunidad a las diversas empresas españolas que participan de incrementar su cartera de contactos.
El Ministerio de Industria, conjuntamente con el ICEX, ha organizado dentro del pabellón un sector de grandes marcas, donde se encuentran empresas desde Telefónica, BBVA, Santander hasta Indra, CAF, Endesa o Técnicas Reunidas.
También existe una zona para áreas sectoriales donde se pueden encontrar 153 empresas, además de una zona institucional que cuenta con 23 expositores, los cuales provienen de la Administración General del Estado, de las Comunidades Autónomas y instituciones como CEOE, CESCE o la Cámara de Comercio.
El objetivo que se ha puesto el Gobierno español es impulsar e incrementar la presencia comercial e inversora de las empresas españolas en China. Para este fin han anunciado que se abrirá un nuevo consulado y una oficina de turismo en Cantón-China, el cual completará las funciones de la Oficina Económica y Comercial que se inauguró en dicha ciudad.
Las pequeñas y medianas empresas cumplen un papel fundamental como el motor económico en lo referido a la creación de empleo y riqueza del país por lo que el Gobierno español ha puesto en marcha diferentes planes de estímulo y de apoyo a las pymes con el fin de relanzar e impulsar los niveles de competitividad, empleo y crecimiento de la economía que tanto está haciendo falta en estos momentos.
La jornada inaugural se cerró con la Cumbre Hispano-China de PYMES en la que se han abordado temas como las políticas de apoyo a las PYMES del gobierno español o el impulso a la internacionalización de las mismas.