Desde el inicio del segundo semestre del año el precio del barril de WTI ha caído más de $10 mientras que el precio del barril Brent lo ha hecho en torno a $8. Esto nos sitúa en un escenario en el que el precio del Brent a día de hoy se coloca por debajo de los $80 el barril y el WTI en $75,75 (precio de cierre del viernes 21 de Noviembre) en lo que a pesar de movimientos de reajuste al alza y posteriores bajadas, todos los analistas coinciden en un descenso que va a continuar. Pero ¿qué ocurriría si este descenso continua y coloca, por ejemplo el precio del barril WTI por debajo de los $70?
Estaríamos ante una situación nueva, hace mucho que no se ha vivido el precio por debajo de esa cantidad, sin embargo, no se ha dado la situación de mantenerse algún tiempo por debajo de ese precio, algo que nos hace reflexionar al respecto.
La situación del petroleo y las expectativas
Las estimaciones de crecimiento de demanda por parte de la OPEP, la EIA y la AIE coinciden en un aumento de la demanda que pasaría de los 900,000 barriles diarios a 1.0 5 millones de barriles al cierre de 2014, y que ascendería a una cantidad entre 1.2 millones y 1.3 millones de barriles diarios en 2015.
¿Cómo manejar los riesgos al invertir en petróleo?
Por otro lado el crecimiento de la oferta se prevé en un aumento alrededor de 1.6 millones de barriles diarios en 2014, descendiendo a 1.3 millones de barriles diarios en 2015, teóricamente casi todo ese crecimiento provendría de la propia producción estadounidense.
Esto ya nos da un primer panorama, la oferta está creciendo más rápido que la demanda y la duda obvia hace referencia al porcentaje de la demanda perdida que será permanente o al que será temporal. Teóricamente aspectos como la mejora del rendimiento del kilometraje de los vehículos nuevos continúa arrastrando la demanda estadounidense en este caso de manera permanente, pero, por otro lado, el aumento de la demanda en los países emergentes, particularmente en China e India, contrarrestaría este hecho y es que realmente y se está generando la nueva demanda.
La caída del precio y los problemas directos y laterales
El problema inicial lo presentarán las grandes petroleras para las que los precios más bajos dificultan la financiación en inversión y rendimiento en dirección a los inversores. El ejemplo de lo ocurrido en la industria minera, con el descabezamiento en Estados Unidos de buena parte de altos directivos y la acumulación de activos a costa del aumento de rendimiento a los inversores, las petroleras están tomando el rumbo del frenazo en el gasto de capital y el mantenimiento de los retornos a los accionistas.
En este contexto la caída del precio del petróleo Brent por debajo de los $80 el barril durante un período de tiempo prolongado tendría como primera víctima la reducción casi obligatoria de los gastos por parte de las grandes petroleras para poder sostener a los pagos a los accionistas; se trata evidentemente de un asunto resbaladizo en el que, no olvidemos, se juega con la posibilidad del déficit en los precios de suministro, lo cual podría redundar en subidas o bajadas vertiginosas con lo cual el supuesto beneficio para los consumidores podría desaparecer de inmediato.
Un reflejo de todo esto, en el caso de Estados Unidos, es la expectativa de la rebaja del combustible por debajo de los tres dólares el galón (3.78 litros) aliviando obviamente el precio que durante este año se ha sostenido por encima de cuatro dólares el galón. En el caso de Europa las cosas no están desde luego tan claras, y en todo caso el reajuste del precio no sería tan inmediato ni tan impactante para el bolsillo del usuario.
Qué podemos esperar en el corto plazo sobre el precio del petróleo
Que siga disminuyendo, todas las señales apuntan en esta dirección. Tanto es así que si tomamos como referencia los mercados de futuros veremos cómo nos encontramos ante el menor número de posiciones largas desde el verano de 2012, teóricamente, y a pesar de lo que parece una buena oportunidad según algunos para la compra de posiciones largas de nuevo, sobre el papel el peso de la opinión contraria al alza de los precios del crudo supera en mucho al de la opinión favorable en previsión.
Todo esto nos lleva a un escenario en el que sí, efectivamente, el precio del crudo Brent ante la frontera de los $80 el barril queda situado por debajo durante un periodo de tiempo, empezaremos a advertir maniobras enérgicas de las petroleras para tratar de volver a aumentar dicho precio. Este sería el resumen básico al menos en lo que a la producción estadounidense se refiere donde, la opción de la reducción de la producción y el almacenamiento resulta muy probable en caso de darse la situación citada.
Otra cuestión bien diferente es la relación entre el precio del petróleo y el de la gasolina en las gasolineras y si es bueno o malo para nuestros bolsillos que caiga el precio del crudo. ¿Quieres saberlo? En este post tienes la respuesta