Ante la inestabilidad reinante, los españoles se han retraído, es decir, han dejado de mirar hacia el fututo, y priorizan sus finanzas diarias que hacen a la vida cotidiana.
La “delicada” actualidad, ha llevado a no arriesgar más de la cuenta, tanto del lado de las entidades financieras como de los consumidores.
Por ejemplo, en el mercado hay a diario muchos productos que no se promocionan, y que sin embargo existen, aunque la mayoría de los consumidores, los desconoce o no se interesa por ellos en momentos de crisis.
Este es el caso de las hipotecas puente, o mejor dicho, el «crédito puente». Pero, ¿Qué es este producto? Es un crédito obtenido como financiación temporal, y con la garantía de un ingreso futuro del prestatario o deudor.
Entonces, es utilizado por personasque necesitan adquirir un nuevo inmueble y no disponen del tiempo necesario para vender su actual vivienda en condiciones óptimas.
De esta manera, el cliente puede solicitar a la entidad financiera que le conceda un «crédito puente», obteniendo una financiación en forma de préstamo personal para sufragar la entrada y los pagos al promotor.
Así, el comprador podrá disponer del dinero necesario para adquirir la nueva casa. Con el tiempo el crédito se cancelará tras la obtención de la hipoteca definitiva, ya que al recibir la nueva vivienda el cliente suscribirá una hipoteca tradicional por un montante superior.
En cuanto a los riesgos, si bien es elevado para la entidad financiera, la garantía frente a una insolvencia también es el doble porque el pago está respaldado por las dos propiedades del cliente.
Sin embargo, hoy los bancos, esquivan a diario ofrecer este tipo de productos.