Durante el primer semestre de 2015, es decir, los 6 primeros meses del año, el banco central de Suiza ha perdido 50.100 millones de francos suizos. Un banco central, que puede imprimir su propio dinero, ¿cómo puede llegar a perder tanto? ¿Cómo afecta esto a su economía?¿ Y al resto de los países?
A principios de este año, las reservas de moneda extranjera del banco de Suiza, sufrieron una fuerte devaluación, cuando abandonaron la política de limitar el valor del franco frente al euro. El banco estuvo comprando euros, para mantener un tipo de cambio mínimo en 1,20 francos suizos/euro.
Como era lógico, cuando Suiza terminó con la política que venía haciendo el día 15 de enero (una tasa fija que lleva vigente 2 años), los agentes del mercado y la fuerza que este tiene, empujaron hacia arriba el valor del franco. Es decir, la devaluación de todos esos euros de reservas que se habían adquirido durante meses. Una apreciación del franco que ha repercutido y mucho en las cuentas del banco suizo.
Además, el banco de Suiza, también ha tenido pérdidas en oro, con una minusvalía de más de 3.000 millones de euros, pues este ha visto cómo su valor ha disminuido durante los últimos meses. Recordemos que el oro, es valor refugio por excelencia. Además añadir la pérdida de más de 28.000 millones de euros, por la volatilidad del mercado de divisas
En un comunicado reciente del banco, se expuso que, el resultado financiero del banco, se debe a la evolución del precio del oro, las divisas, así como las variaciones de mercados capitales, por lo que era de esperar, que los resultados de este primer semestre no iban a ser muy satisfactorios.