La respuesta a esta pregunta es afirmativa, es un gran momento para adquirir una vivienda, bien una primera como lugar de residencia habitual y también un segundo inmueble para descansar en determinadas épocas del año o como inversión de futuro, que podamos alquilar o vender cuando los precios se revaloricen.
Si bien hace unos años el clima era bastante desfavorable, con la caída contante de los precios de los inmuebles, que hacía que al poco tiempo de adquirir una vivienda esta perdiese valor, sin contar con la posición de los bancos, que habían cerrado el grifo de la financiación y la concesión de préstamos hipotecarios, ahora sí podemos afirmar sin miedo a equivocarnos que las cosas están cambiando.
La economía se va recuperando, lentamente, pero con paso firme, tal vez al cambio de gobierno los mercados vuelven a confiar en el rumbo de este país, la banca empieza a conceder nuevamente hipotecas y el Euribor hace tiempo que se mantiene bastante bajo.
Por su parte, el precio de los inmuebles empieza a subir, siendo pues un buen momento para este tipo de inversión pues aún no han alcanzado un nivel muy alto, y todavía se pueden encontrar verdaderas gangas, y con la absoluta certeza y garantía de que su precio aumentará en los próximos años.
Estas nuevas circunstancias hacen que sea una buena oportunidad para el ciudadano de a pie, que quiere tener una vivienda en propiedad, para aquellos que quieren optar a tener una segunda residencia y, por supuesto, para los inversores.
Antes de meterse en una hipoteca
Antes de dar el paso definitivo de firmar una hipoteca hay que hacer cálculos rigurosos sobre si seremos capaces de afrontar los pagos, y no solo a corto plazo, pues como todo sabemos una hipoteca es una carrera de fondo, un compromiso que adquirimos para 30 o 40 años. Si no estamos demasiado seguros al respecto, tal vez sea mejor vivir de alquiler, que siempre nos deja margen de maniobra pudiendo adaptarnos a distintas viviendas con el paso del tiempo que se adecúen a nuestro nivel adquisitivo.
Para hacer nuestra labor de investigación y nuestros cálculos podemos recurrir al mejor portal para financiar tu hipoteca, Krediti Web; visita su web y empieza a hacer valoraciones sobre la viabilidad de tu proyecto de adquirir un inmueble con su calculador online.
Cuando queremos hacer negocio o adquirir una segunda vivienda
Es muy distinto el acercamiento que hacemos en la búsqueda de una vivienda para vivir que cuando lo que queremos es sacarle la máxima rentabilidad como inversión, buscar un paraíso en la Tierra como segunda residencia para escaparnos cada vez que tengamos oportunidad o, ¿por qué no? ambas cosas a la vez. Esta es la oportunidad que te da la compraventa de inmuebles en Mallorca, la isla más grande del archipiélago balear, la que más turistas recibe, donde tanto el disfrute como el negocio con la adquisición de una inmueble están más que asegurados.
Para tener una visión global de todo lo que nos ofrece esta isla, lo mejor es dejarse asesorar por una inmobiliaria en Mallorca, pues son las agencias inmobiliarias de Palma de Mallorca las que te podrán indicar con mayor acierto cuál es la zona de isla que más te conviene según tus propias preferencias, el tipo de inmueble que debes adquirir o el destino que le quieras dar.
Los factores determinantes serán muchos, tales como el que hemos mencionado sobre el uso prioritario que se le vaya a dar. Si es para disfrute personal, siempre basaremos la búsqueda en nuestra propia familia y nuestros gustos, pero si queremos alquilarla y sacarle una buena renta, entonces lo mejor será conocer cuáles son las áreas más cotizadas de la isla y cuál es el tipo de vivienda más demandado.
Sea cuál sea el objetivo, es seguro que Mallorca no nos defraudará. Gracias a un clima privilegiado durante todo el año, con una temperatura media anual de 17,9 °C, Mallorca se puede disfrutar en cualquier época del año.
Archiconocida por su turismo de sol y playa, también cuenta con un precioso casco antiguo que bien merece perderse por sus calles para dedicarse a la contemplación. Algunas de las visitas obligadas, en este sentido, son La Catedral, el Palacio de la Almudaina, la Lonja y la Plaza Mayor, rincones que cualquier viajero no debería perderse.
El paisaje que enmarca los monumentos no puede ser más bello, con las barcas de pescadores, los pinares y las palmeras características de esta isla. La costa de la isla está formada por calas, playas y acantilados, bellos parajes para tumbarse y disfrutar del mar. En el interior, con los brazos abiertos te espera un pueblo amable con localidades típicamente mallorquinas y sierras con alturas de 1.500 metros. Aquí podrás conocer la verdadera esencia de la isla, disfrutar de su riqueza paisajística y cultural y profundizar en la gastronomía isleña de Mallorca, de gran sabor y tradición.