Uno de los pocos países que podría llegar a cumplir con la reducción del déficit fiscal es Portugal, ya que su primer ministro, José Sócrates, señaló que cumplirán con el objetivo principal de lograr reducir el déficit fiscal.
Esta afirmación también pudo haber estado dirigida a calmar a los mercados financieros respecto a la crisis de Portugal, que en los últimos meses han presionado fuertemente a los títulos de la deuda de Portugal, generando desconfianza dada la crisis de ese país.
El pasado viernes el Banco Central Europeo (BCE) comunicó que mantendrá su política de compra de títulos de deuda de los países de la eurozona, como los de Portugal. Es por ello que se busca un esfuerzo mancomunado entre la Comisión Europea, el Banco Central europeo y los Estados que se encuentran en riesgo.
Desde el Gobierno Portugués se maneja el mensaje hacia dentro y hacia los mercados, de que para este año Portugal logrará cumplir con la meta impuesta de reducir el déficit fiscal al 7,3%, respecto al 9,4% de 2009.
Además de que para 2011, Portugal se ha propuesto la meta presupuestaria de llegar al 4,6%. Junto al estricto cumplimiento de los objetivos presupuestarios que ya han sido aprobados bajo el nuevo plan de estabilidad fiscal.
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