El llamado balance o balanza de pagos se refiere a un documento contable, en el cual se registran operaciones comerciales, de servicios y de movimientos de capitales que son llevadas a cabo por los residentes en un país con el resto del mundo durante un período de tiempo establecido, siendo este usualmente de un año.
La balanza de pagos aporta información de forma detallada sobre todas las transacciones entre los residentes y los no residentes.
Mientras que las transacciones que son registradas en la balanza de pagos aparecen agrupadas en diferentes sub-balanzas, según el carácter que posean. En tanto que, la diferencia entre ingresos y pagos de cierta sub- balanza se denomina saldo de la misma. En cuanto al saldo final de la balanza de pagos en su conjunto, este dependerá del régimen de tipo de cambio de la economía.
La balanza de pagos se encuentra estructurada en cuatro subdivisiones:
– Cuenta corriente
– Cuenta de capital
– Cuenta financiera
– Cuenta de errores y omisiones
En el caso de un sistema de flotación limpia, la balanza de pagos siempre está equilibrada, teniendo saldo cero. Pero cuando la economía se llega a regir por un tipo de cambio fijo, en este caso el saldo es equivalente al cambio en las reservas netas del Banco Central.
En cuanto a la estructura y directrices para poder elaborar la balanza de pagos se establecen en el Quinto Manual de Balanzas de Pagos del Fondo Monetario Internacional.