Un reflejo de la crisis por la que pasa Irlanda no es solamente el que tuviera que recurrir a un plan de rescate, sino también que la economía irlandesa podría ver como finaliza 2010 registrando un récord de compañías insolventes y quiebras de empresas en Irlanda, golpeando más fuerte, como en España, a las empresas y pymes de la construcción.
Existen unas 1.392 empresas que se debieron declarar en quiebra desde inicios de año y hasta noviembre, esto elevó hasta un 11% el incremento frente a similar período de 2009, y en el anterior mes, fueron unas 142 compañías las que debieron cerrar sus puertas, esto es un 21% más que durante Noviembre del año pasado.
Por lo que efectivamente quedará el total anual en cerca de las 1.500 insolvencias previstas. Mientras que en el sector de la construcción, unas 26 empresas han quebrado durante el pasado mes de Octubre, 42 durante Noviembre, llegando al total desde inicios de 2010 a 419, en cifras similares desde 2008.
Otro de los sectores que han sido afectados por la crisis económica que azota a Irlanda son las empresas de la industria de los servicios, generando unos 22 cierres durante el pasado mes de Octubre y 34 durante Noviembre.
A la vez en ciertos sectores se ha reducido la cantidad de quiebras, entre ellos el sector comercial minorista y el que agrupa a bares, restaurantes y hoteles. El comercial con 168 y el de bares, restaurantes y hoteles registraron 178 quiebras. Mientras que, las empresas que se debieron declarar en suspensión de pagos, si se compara el periodo hasta Noviembre, el incremento respecto a 2009 fue del 77%.
Este tipo de datos no le escapan ni a España ni a Portugal ni a ningún país que comparta crisis similares, ya que son consecuencias de ello.
Una de las consecuencias tras aprobarse los presupuestos generales para 2011, es que la hora de trabajo se pasará a pagar 1€ menos, es decir 7,65€, unos 1.300€ mensuales.
El Gobierno de Irlanda ha puesto en marcha una serie de medidas tendientes a reducir su déficit fiscal y acceder al rescate conformado por 85.000 millones de euros de parte de la UE y el Fondo Monetario Internacional (FMI), entre las que se encuentra reducir el salario mínimo interprofesional, algo que producirá mejoras en el mercado laboral.
Todo esto complementado con el plan de ajuste cuatrienal de 15.000 millones de euros en el que se incluyen la reducción salarial, junto a despidos masivos dentro del sector público y el incremento de impuestos.
Imagen: morovispuertorico