El acceso a nuestra entidad bancaria desde nuestro propio smartphone se ha convertido en una tendencia que ha ido aumentando notablemente con la llegada de la pandemia.
Es por ello, que son muchas las entidades que ofrecen diferentes servicios dentro de la banca móvil para favorecer la experiencia de sus usuarios, mejorandolos de cara al próximo año. A continuación veremos algunas tendencias que se desarrollarán durante los próximos años.
Próximas tendencias en la banca móvil
Una de las mejoras que se aplicará a la banca móvil, será el uso de la misma mediante la propia voz. Se trata de una de las mejoras que más se llevará a cabo próximamente, teniendo en cuenta la cantidad de empresas de servicios financieros que ya se encuentran apostando por esta mejora. De este modo, los expertos calculan que, en un par de años, gran parte de las búsquedas se realizarán exclusivamente mediante la voz.
No obstante, no debemos cometer el error de creer que a partir de ahora todas las mejoras tecnológicas girarán en torno a la búsqueda por voz. Este tipo de interfaces se sofistican con el paso del tiempo, con el objetivo de mejorar la experiencia de uso de los clientes.
También nos vamos a encontrar con importantes mejoras respecto a la biometría, dada su importancia ante el aumento del manejo de datos. De hecho, a día de hoy los expertos ya no consideran la tecnología biométrica como un elemento complementario, sino como uno directamente necesario para el desarrollo de las nuevas tecnologías. Y es que, mediante estudios y diversas encuestas, se ha demostrado que los usuarios se encuentran muy dispuestos a adaptarse a este nuevo método de seguridad.
Otra tendencia muy importante a destacar será el acercamiento a la humanización de los servicios. Este va a suponer un gran reto para las compañías de servicios financieros, puesto que en ningún momento debe darse mayor prioridad a la tecnología antes que a las personas que hacen uso de ella. De forma que debe mejorarse la experiencia digital, sin dejar de lado la humanización de estos servicios. Así, se da por eliminado el miedo a la obsolescencia del factor humano.
Las verificaciones de identidad van a ocupar un papel fundamental dentro de las mejoras para la banca móvil. Lo que hace años se consideraba un auténtico reto, casi imposible de lograr, a día de hoy se ha convertido en toda una tendencia a mejorar. Poder verificar nuestra identidad de la manera más rápida posible, elimina en gran medida las probabilidades de que haya fraude o robo, por lo que la experiencia del usuario es mucho más segura y satisfactoria.
En unos años, será posible rastrear la identidad digital en pocos segundos, pudiendo además monitorear las transacciones por medio de diversas entidades y en lugares del mundo diferentes. La consecuencia de esta mejora, es una globalización de los servicios para cualquier persona.
Por último, pero no menos importante, veremos una mejora respecto a los sistemas de pago. Con el paso del tiempo, estos se alejaran más y más del sistema de pago tradicional, aportando una forma totalmente diferente de hacer frente a nuestros pagos, incluso los del día a día.